Chequia conservará las Baby Box
La República Checa conservará las Baby Box, o sea puntos de entrega seguros para recién nacidos abandonados. Así se ha decidido a pesar de las objeciones de la Organización de las Naciones Unidas, que opina que violan los derechos de la infancia.
La comisión considera además que no se requiere adoptar una normativa especial que establezca las dimensiones de estas cámaras situadas junto a los centros de maternidad en el país, ya que las leyes vigentes lo regulan todo suficientemente. Esta postura de la comisión fue celebrada por Ludvík Hess, fundador de las Baby Box y presidente de la organización Statim que las administra.
”Desde mi punto de vista, esta ayuda a la madre en situación difícil y a su hijo es sumamente importante. Además de asegurar el anonimato a la madre, garantiza que el bebé será atendido de inmediato por pediatras y posteriormente podrá ser adoptado por una pareja que le brindará el cariño y las atenciones que su madre, por cualquier motivo, no le daría. Lo fundamental para mí es que salvamos la vida al recién nacido”.Hess reconoció no obstante, que las Baby Box son sólo una de las formas de ayuda a las madres en situación difícil. El funcionamiento de la red de estos puntos de recogida para recién nacidos fue valorado también por la Comisionada de Derechos Humanos del Gobierno, Monika Šimůnková, así como por varios pediatras.
Ondřej Čapek, jefe médico de la Sección de Pediatría del hospital de Cheb, en Bohemia Occidental, destacó que las Baby Box son importantes especialmente en las zonas donde se da una mayor concentración de gitanos y otras personas con escasos recursos, así como en lugares donde se registra mayor prostitución.
”En las zonas cerca de las fronteras con Alemania registramos un elevado número de mujeres que no tienen una relación ideal con sus hijos recién nacidos. Las Baby Box ofrecen así un mejor futuro a estos bebés nacidos por error, digamos. Y, en comparación con otras regiones de la República Checa, en Bohemia Occidental hay muchas más mujeres que abandonan a sus bebés”.
Ludvík Hess prevé ubicar en el futuro en las cámaras un texto en varios idiomas que informe a las mujeres de otras eventuales formas de cómo solucionar su difícil situación para quedarse con su bebé. También quiere que el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales se encargue del registro de los recién nacidos, situados en las Baby Box.La primera caja anónima para bebés abandonados fue instalada en junio de 2005, en Praga. Actualmente existen en el país 47 Baby Box que hasta el presente ayudaron a salvar a 62 niños recién nacidos. Semejantes instalaciones existen en Alemania, Suiza, Austria y Hungría.