Chequia comienza a endurecer el control sobre la venta de armas

El Senado ha aprobado una enmienda para obligar a comerciantes y dueños de polígonos de tiro a informar sobre clientes sospechosos, como parte de una reforma legal que entrará plenamente en vigor en 2026. Esta regulación se enmarca en un proyecto del Gobierno que busca ejercer más control sobre la venta y posesión de armas en el país.

El Senado checo ha aprobado una enmienda a la Ley de Armas que exigirá a  vendedores de estos artículos y a propietarios de campos de tiro reportar a la Policía a clientes sospechosos. Esta medida, que entrará en vigor a partir del próximo año, se adelanta a una reforma integral de la legislación que se aplicará en 2026. La iniciativa fue motivada, en gran medida, por la tragedia ocurrida hace casi un año en la Facultad de Filosofía de Praga, donde un atacante solitario mató a 14 personas e hirió a otras 25.

El nuevo marco legal endurecerá las reglas sobre la venta de armas, introducirá un registro central digitalizado, facilitará la incautación por parte de la Policía y permitirá a los médicos acceder al registro de portadores. Además, los profesionales de la salud estarán obligados a notificar a las autoridades si determinan que un paciente representa un riesgo para la seguridad, en caso de notar rasgos que indiquen comportamientos peligrosos, durante una examinación.

Sin embargo, esta reforma completa no entrará en vigor hasta 2026, debido al tiempo necesario para digitalizar los registros policiales y médicos. Mientras tanto, la disposición ya aprobada que obliga a informar sobre clientes sospechosos será implementada a inicios del próximo año.

El senador Robert Šlachta, ex jefe de la Unidad de Élite de la Policía para Combatir el Crimen Organizado, aseguró a la Radio Checa que la ley debería aplicarse cuanto antes.

“He servido en la fuerza policial durante 27 años. Sé cómo funciona la fuerza y ​​sé que, ante todo, los agentes necesitan esta información”.

Róbert Šlachta | Foto: Michaela Danelová,  iROZHLAS.cz

Además, la ley reducirá el intervalo de revisiones médicas para los propietarios de armas de diez a cinco años y permitirá a la Policía ordenar una evaluación médica en cualquier momento. A pesar de estas modificaciones, no se incluirán pruebas psicológicas obligatorias para obtener licencias de armas. En la actualidad, solo se requiere un certificado de aptitud física, aunque un médico puede solicitar la opinión de un psicólogo si tiene dudas.

Por su parte, el senador Martin Červíček, ex jefe de la Policía Checa, comentó también a la radio que está seguro de que los poderes ampliados son un paso en la dirección correcta.

“No veo motivos para temer que se pueda abusar de los poderes ampliados. Por el contrario, permitirán a la Policía responder con rapidez a cualquier riesgo potencial de seguridad que pueda surgir”.

Martin Červíček | Foto: Martin Pařízek,  Český rozhlas

La enmienda también preserva el derecho a adquirir, poseer y portar armas bajo condiciones legales. Este derecho fue incorporado a la Constitución checa en 2021 tras una campaña que buscaba contrarrestar las restricciones propuestas por la Unión Europea.

Sin embargo, la opinión pública en el país ha cambiado desde el tiroteo de diciembre de 2023. Una encuesta realizada por la agencia STEM indicó que el 80% de los checos apoyan condiciones más estrictas para la tenencia de armas, incluidas revisiones médicas más frecuentes y pruebas psicológicas.

Actualmente, Chequia cuenta con más de 300.000 propietarios de armas con licencia y más de un millón de armas en circulación, en un país de 10,7 millones de habitantes.