Aprobado el primer paso hacia la devolución de los bienes a las Iglesias

La Cámara de Diputados aprobó este sábado la ley sobre la restitución de los bienes a las Iglesias. El proyecto supone la devolución de un 50% de los inmuebles confiscados por el régimen comunista checoslovaco más una indemnización de 2.300 millones de euros.

Foto: ČTK
La Cámara de Diputados aprobó este sábado una de las leyes más discutidas tras la Revolución de Terciopelo de 1989: la restitución de los bienes de las Iglesias confiscados por el régimen comunista checoslovaco tras el golpe de Estado de 1948.

La nueva ley supone que el Estado checo devolverá a las Iglesias inmuebles por un valor de 3.000 millones de euros, y además les pagará una indemnización de 2.300 millones de euros durante los próximos 30 años. En cambio, en el futuro dejará de prestar los apoyos financieros a las Iglesias.

Joel Ruml
La coalición gubernamental impuso el proyecto a pesar de la acalorada protesta de la oposición y gran parte de la opinión pública.

“La ley indigna a mucha gente, ya que suele ser interpretada de manera incorrecta”, expresó el presidente del Consejo Ecuménico de las Iglesias, Joel Ruml.

“La ley sobre la restitución suele ser interpretada de manera incompleta. La denominación restitución es incorrecta en este caso, ya que no se trata de una devolución total de lo bienes. Sería más acertado hablar de un intento de rectificar la relación entre las Iglesias y el Estado en vista de que, por diversos motivos, una considerable parte de los bienes ya no puede ser restituido”, dijo.

Bohuslav Sobotka,  foto: ČTK
De todas formas, los autores de la nueva ley han ganado la batalla pero no la guerra, ya que el proyecto ahora pasa a las manos de la Cámara Alta en la que la oposición dispone de la mayoría de votos.

El jefe del Partido Socialdemócrata, Bohuslav Sobotka, destacó que su agrupación política hará todo lo posible para impedir la aprobación de dicha ley.

“Estoy convencido de que el Senado rechazará el proyecto y en septiembre volveremos a procurar rechazarlo en la Cámara de Diputados”, afirmó.

Pavel Kováčik
La oposición sostiene que durante una crisis financiera global, el Estado checo no debería comprometerse a proyectos que suponen gastos tan elevados.

“Esta ley llega en el momento en que casi todos los ciudadanos deben apretarse el cinturón. Y si lo presenta un gobierno que se autodefine como el gabinete de la responsabilidad presupuestaria, la pregunta es ¿dónde está esa responsabilidad?”, subrayó el jefe de los diputados del Partido Comunista, Pavel Kováčik.