Tribunal disuelve al Partido Obrero de extrema derecha
El ultraderechista Partido Obrero será disuelto. El Tribunal Administrativo llegó a esta decisión tras haber estudiado detalladamente la segunda demanda que presentó el Gobierno checo contra esa formación. El Tribunal dio a conocer su sentencia este miércoles en la ciudad de Brno.
El veredicto sobre la disolución del Partido Obrero fue dictado por el juez Vojtěch Šimíček, ante una sala repleta de gente. Šimíček ha señalado que la sentencia es una reacción al programa, los ideales y los símbolos de esta agrupación, que contienen elementos racistas y xenófobos, y enlazan con la ideología nazi de Adolfo Hitler. Según Šimíček, la existencia de la formación amenaza la democracia en el país.
”La decisión del Tribunal cabe concebirla en primer lugar como una medida preventiva que, no obstante, es indispensable para la futura conservación del sistema constitucional y democrático en el país”.Militantes y simpatizantes del Partido Obrero expresaron su descontento con el veredicto, manifestándose frente a la sede del Tribunal Administrativo en Brno. Los ultraderechistas trataron de provocar disturbios en la ciudad, pero fueron intervenidos por la policía. El líder del partido Tomáš Vandas destacó que su formación no se da por vencida y que están decididos a proseguir sus actividades, aunque sea bajo otro nombre.
Mientras tanto, el oficialismo y los partidos parlamentarios aplaudieron
la sentencia. El ministro del Interior, Martin Pecina, dijo que la decisión de disolver el Partido Obrero es una buena noticia para la República Checa. Al mismo tiempo recalcó que se trata de un importante paso en la lucha contra el extremismo.“En una sociedad democrática, la lucha contra el extremismo nunca acaba. Podemos tratar de erradicar semejantes fenómenos en sus inicios, o esperar a que los neonazis comiencen a lanzar cócteles Molotov. Estoy convencido que hemos hecho bien al terminar pronto con el Partido Obrero. Cada paso semejante ayuda a debilitar el movimiento neonazi y por ello seguiremos por este camino”.
El abogado Tomáš Sokol, quien había representado en el caso al Gobierno, señaló que más que el propio veredicto sobre la disolución del Partido Obrero, considera importante que el Tribunal haya determinado detalladamente en su sentencia los criterios indispensables para que sea posible disolver un partido político. Esto, según Sokol, supone un significativo efecto político y jurídico para el futuro.En caso de que en el curso de los próximos 30 días el Partido Obrero presentara un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional, la sentencia sobre su disolución perdería vigencia temporalmente. La formación podría continuar en sus actividades hasta que el Tribunal decida el caso.