Tezcatlipoca viaja de Brno a Zaragoza

Omar Rojas

Omar Rojas, estudiante mexicano de Brno, ha ganado un importante premio en Zaragoza. Alumno del último año del doctorado en composición musical en la Academia Janáček de Artes Escénicas y Musicales, conocida como JAMU por sus siglas en checo, Rojas triunfó en España con la obra ‘Tezcatlipoca’, inspirada en la mitología azteca.

Omar Rojas
Tezcatlipoca, el señor de las sombras, es la deidad azteca que se encarga de custodiar el inframundo. En él se basó el compositor mexicano Omar Rojas, radicado en Chequia desde hace varios años, para escribir una obra que presentó al sexto Concurso de Composición Musical de la Universidad de Zaragoza, que ganó.

‘Tezcatlipoca’ es una obra para ensamble de cámara que será estrenada este martes en el auditorio de la Universidad de Zaragoza, como el propio Omar Rojas comenta.

“Este premio consistió en un diploma, una suma económica y el estreno de mi obra, con la que participé y gané el premio, que se titula ‘Tezcatlipoca’, una obra para ensamble de cámara, específicamente para trece instrumentos, que será estrenada el 18 de octubre en el auditorio de Zaragoza, en España”.

Omar Rojas dice que siempre se ha sentido fascinado por la leyenda de Tezcatlipoca.

“Tezcatlipoca es uno de los dioses aztecas. Es el señor de las sombras. En la mitología azteca siempre hay una dualidad, y así como Quetzalcoátl es el dios de la vida, Tezcatlipoca es el señor de las sombras, el guardián del inframundo. Es quien se encarga de cuidar los restos humanos. Hay una leyenda azteca muy bonita sobre esto. De acuerdo a la mitología de esta civilización, cada humanidad tiene un cierto lapso de vida y después perece. Con los restos de esa humanidad se crea una nueva raza humana”.

Como guardián del inframundo, a Tezcatlipoca le toca un papel fundamental en la creación de los diversos ciclos de la humanidad, agrega el compositor.

Tezcatlipoca
“A estos ciclos les llaman soles y nosotros vivimos actualmente en el quinto sol. Una de las humanidades fue destruida por el agua, otra por las fieras, por el fuego, etc. Y bueno, la deidad que se encarga de guardar estos restos es Tezcatlipoca, justamente, que es quien gobierna en el inframundo azteca. Quetzalcoátl, que es la contraparte de Tezcatlipoca, conocido como el Tezcatlipoca blanco, toca una especie trompeta de cuerno de caracol cada vez que va a bajar al inframundo para que este se abra y Tezcatlipoca le pueda dar los restos de la humanidad que pereció para con ellos poder crear la nueva”.

En eso se basó para escribir ‘Tezcatlipoca’, agrega.

“La obra trata de esto prácticamente, de dualidades. Es una pieza oscura, no podía ser una pieza muy consonante en este sentido, es una pieza oscura, pero tiene estos intereses, es muy etérea, por ejemplo, porque si estamos hablando del inframundo tiene que ser algo más etéreo, no puede ser algo tan concreto”.

Omar Rojas comenta que se enteró del concurso en Zaragoza gracias al departamento de extensión de la Facultad de Arte de Brno, donde cursa el último año de doctorado, aunque en realidad vive en Ostrava.

“Estudio ahí en Brno, el ultimo año de doctorado ya. Y esta pieza tiene relación con esos estudios, porque lo desarrollé como parte de mi proyecto de investigación. O sea la investigación teórica que estoy haciendo lo que me está dando son resultados con los que puedo escribir música y esta pieza la escribí como un experimento basado en los resultados de esta investigación. Y bueno, también tenemos en la facultad que escribir cierto número de piezas cada año y esta fue una de las piezas que entregué”, sostiene.

Así que en ese sentido, el premio también honra a la JAMU de Brno, comenta el compositor.

Omar Rojas
“Sí, claro, por supuesto, y no diría un poco, bastante. Los últimos años de mi formación artística han transcurrido en Brno, los primeros fueron en México, en el CIEM, que también recibí una gran preparación allá. Ambas instituciones, tanto el CIEM en México como JAMU en Brno tienen un gran peso en este premio”, asevera.

Aunque lleva gran parte de su vida dedicado al estudio de la música, son estímulos como este premio los que le indican a Omar Rojas que no se ha equivocado, que ha tomado el camino correcto.

“Yo diría que definitivamente lo pondría en el top ten de los logros de mi carrera, si no en los primeros lugares. Es la primera vez que recibo un reconocimiento internacional de este tamaño. Ya había recibido becas, alguna publicación y cosas por el estilo, pero nunca un premio como tal, un primer lugar. Alguna vez de adolescente recibí en México un premio por la mejor letra de una canción, pero de este tamaño es la primera vez que recibo algo así”.

La idea de Omar Rojas es poder estrenar esta obra lo antes posible en Brno, la ciudad que tanto le ha dado y a la que siempre regresa. Pero para ello debe negociar antes con las autoridades de la Universidad de Zaragoza, ya que debido al premio, por un tiempo ellos pueden hacer grabaciones o interpretaciones de la obra.

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