Škoda Auto es el Exportador del Año por décima vez consecutiva
Las exportaciones checas alcanzaron el nivel más alto de la historia. Škoda Auto, la empresa que más contribuyó, fue galardonada con el premio Exportador del Año.
Durante el año pasado, la empresa exportó al extranjero productos y servicios en un valor total que ronda los 13 000 millones de euros.
Stanislav Schneidr, director de las relaciones exteriores de la empresa, precisó que para los próximos años se cuenta con aun más crecimiento.
“A partir del año 2020, una parte importante de nuestras exportaciones será constituida por coches exclusivamente eléctricos, fabricados en la ciudad de Mladá Boleslav. Para el año que viene tenemos programado también empezar con la producción del modelo híbrido de Škoda Superb”.
Los éxitos de la industria automovilística, la más importante del país, no se limitan al premio para Škoda Auto. Otra de las empresas que destacan es la DGS de la ciudad de Liberec, que se dedica a la producción de armazones y componentes de aluminio.
Debido al creciente de interés por parte de los clientes, la empresa está aumentando la capacidad de producción no solo en la República Checa, explicó el director de personal, Michal Mocek.
“En este momento nos centramos en el aumento de producción en China, donde ya disponemos de una fábrica y otra está en construcción. Sin embargo, no podemos dejar de mencionar también la región de Liberec. Allí se va a edificar también una nueva fábrica”.La capacidad de las empresas checas de entrar en los mercados más exóticos se refleja por ejemplo en los resultados de la productora de autobuses Iveco.
Sus vehículos circulan tanto en Asia como en África, comentó el director Jan Kimla.
“Uno de los grandes éxitos de la época más reciente fue la venta de unos 450 autobuses a Costa de Marfil. Otros destinos interesantes son por ejemplo Kazajistán y Uzbekistán, o sea países poco tradicionales. Me atrevería a decir que hoy exportamos a todo el mundo”.
Según los datos de la Oficina de Estadísticas Checa, las exportaciones de las empresas checas alcanzaron el año pasado el nivel más alto de la historia. Se trató de unos 160 000 millones de euros. Es más, todo indica que el año en curso va a ser aún más exitoso.