Signal: el festival de la luz que atrae a medio millón de visitantes
El festival Signal que empezó en Praga es uno de los mayores eventos de su género en Europa. Sus instalaciones luminosas atrajeron el año pasado medio millón de visitantes.
El festival Signal celebra su sexta edición del 11 al 14 de octubre presentando obras e instalaciones de 26 artistas checos y mundiales, entre ellos, por ejemplo, el francés Romain Tardy, comentó Matěj Vlašánek, coordinador del programa.
“Uno de los broches de oro de esta edición es la instalación “Future Ruins” de Romain Tardy. Se trata de una combinación del videomapping con una instalación luminosa. Habrá una proyección en la fachada de la Iglesia de San Cirilo y Metodio, y en el parque delante de la iglesia habrá unas estructuras de lámparas de ledes inspiradas por los elementos arquitectónicos de la iglesia”.
Las instalaciones del artista francés se encuentran junto con otras cinco obras en el barrio Karlín, a donde el festival se expande por primera vez para quitarle una parte del peso al centro de la ciudad. La tercera localidad principal es el barrio Vinohrady.Los organizadores decidieron ampliar la zona del festival debido a que, según las estimaciones, el año pasado acudieron al evento unas 500.000 personas.
Este año, los visitantes pueden disfrutar también de un proyecto especial que es resultado de la colaboración con el festival de música Cuerdas de Otoño, explicó Vlašánek.
“En lo que se refiere al programa de acompañamiento, me gustaría destacar un proyecto que combina un concierto de música clásica tocada en órgano con una instalación audiovisual en la Iglesia de San Salvador”.
Por primera vez, el festival dispone de un tema central, que es el centenario de la fundación de Checoslovaquia.
Sin embargo, como subrayan los organizadores, también prestan atención a los futuros cien años.“Preguntamos a los artistas cuál es su visión de la sociedad y del arte de los próximos cien años. La respuesta está en algunas de las obras exhibidas en el marco del evento”.
Los espectáculos empiezan cada día a las siete y terminan a las once de la noche. La instalación más visitada suele ser tradicionalmente el espectáculo luminoso en la fachada de la Iglesia de Santa Ludmila en el barrio Vinohrady.