Se cumplen 10 años del escándalo del metanol que se cobró 50 vidas
Los acontecimientos pasaron a la historia de la criminología como el caso con el mayor número de personas imputadas.
La primera víctima fue un hombre de 62 años de la ciudad de Havířov que murió el 3 de septiembre de 2012. A causa del metanol falleció también su pareja. Más intoxicaciones del alcohol metílico se registraron pronto en la región de Moravia-Silesia, pero también en Vysočina, Bohemia del Sur, Bohemia Central, Ústí nad Labem y Praga. El alcohol adulterado también mató incluso en Polonia, donde fallecieron tres personas.
El alcohol mezclado con metanol mató en Chequia a casi 50 personas. Otras decenas de personas se quedaron con secuelas permanentes, como, por ejemplo, ceguera. El caso afectó a unas 140 personas en total.
Ley seca y condiciones más estrictas
El Gobierno checo reaccionó el 12 de septiembre de 2012 prohibiendo vender licores en puestos de venta. Un día más tarde se dejaron de vender en todo el territorio checo bebidas alcohólicas con más de 20% de alcohol. Las últimas restricciones permanecieron en vigor hasta octubre de 2013.
La causa supuso unas condiciones más estrictas para la fabricación y distribución de licores. Entre otras cosas, se estableció un nuevo tipo de sellos fiscales para el alcohol y se prohibió por la ley vender licores en envases de volumen superior a 3 litros.
Rudolf Fian y Tomáš Křepela, acusados de fabricar la mezcla contaminada, fueron condenados a una pena excepcional de cadena perpetua. El distribuidor principal del alcohol envenenado, Jiří Vacula, fue condenado a 15 años de cárcel.
