Se celebra una nueva edición del festival Mene Tekel contra el totalitarismo
El festival internacional contra los regímenes totalitarios llamado “Mene Tekel” tiene lugar estos días en diferentes partes de la República Checa. La edición número 13 del festival está centrada en el tema de la familia.
Se trata de un proyecto internacional cuyo objetivo es recordar los hitos históricos de la República Checa y otros países europeos donde se han violado los derechos humanos básicos.
El proyecto surgió en reacción a la falta de interés de la sociedad en el destino de los presos políticos de los años 50 y presenta testimonios de la ilegalidad de los regímenes totalitarios, enfocándose principalmente en las víctimas del nazismo y el comunismo.
Los visitantes del festival pueden ver diferentes exposiciones, documentales, reconstrucciones de procesos políticos, o escuchar testimonios de antiguos presos políticos que vivieron los regímenes totalitarios.
El tema principal de este año es la familia, como destaca el director del proyecto, Jan Řeřicha.“Mene Tekel es un festival interdisciplinario, queremos incluir al público más amplio. Inauguramos una exposición en el monasterio franciscano de Praga. Este año nos dedicamos a las familias afectadas por el totalitarismo, no a las personas que estuvieron en la cárcel”.
Una de las exposiciones que se inauguraron este lunes documenta el destino de las familias campesinas que se convirtieron en víctimas de la propaganda comunista en este país en los años 50. La exposición bajo el nombre “Rozkulačeno!” describe la violenta colectivización de la agricultura, que influyó mucho en la vida de los campesinos, según sostuvo Michal Hroza del Instituto para el Estudio de los Regímenes Totalitarios.
“Además de las ejecuciones y largas penas de prisión, el campesinado se vio afectado por el hecho de que más de 5000 familias tuvieron que abandonar sus hogares. Estas familias fueron privadas de sus tradiciones y de la oportunidad de vivir y trabajar en la propiedad de sus antepasados. El régimen comunista cometió una gran injusticia con este violento reasentamiento”.Una de las películas que se proyectaron en el marco del festival es “La Maleta de Hana”, un documental basado en la historia de dos niños que crecieron en Checoslovaquia antes de la Segunda Guerra Mundial. Es un testimonio de Jiří y Hana Brady, quienes en los años 30 y 40 del siglo XX fueron deportados al gueto de Terezín y perdieron a sus padres. Hana murió a la edad de 13 años en Auschwitz, y su hermano, quien sobrevivió el Holocausto, murió este enero en Canadá.
En el marco del festival se otorgó asimismo el premio “Caballero de la Cultura Checa”. El premio lo reciben personas que nunca traicionaron los más altos principios morales en su vida civil o creación artística.Este año fueron galardonados el escritor František Šedivý, el director de orquesta Libor Pešek, y el dramaturgo y rabino Karol Sidon. En las damas de la cultura checa se convirtieron las escritoras Erika Bezdířková y Helena Havlíčková.
De manera póstuma recibieron el premio el historiador Zdeněk Kalista, el escenógrafo Bedřich Barták, las hermanas pintoras Jitka y Květa Válová, y el cantante Karel Kryl.
El festival Mene Tekel continuará hasta el 3 de marzo.