Premios Descartes 2004: De ciencia ficción a ciencia realidad
La ciencia no es para los científicos, es para todos. En Praga fue otorgado este jueves el Premio Descartes de la UE por la investigación. Por primera vez en la historia fue concedido también el Premio Descartes por la divulgación de la ciencia.
Ocho equipos de investigación de 17 países aspiraron a este prestigioso galardón de la UE, que se propone fomentar la cooperación de grupos de científicos a través de las fronteras. Proyectos sobre el tratamiento del cáncer o enfermedades del corazón, la investigación genética para luchar contra defectos neurológicos hereditarios, o la seguridad en la comunicación por Internet pasaron a los finales.
Entre los finalistas figuraron también científicos checos. El físico Václav Drchal, por ejemplo, participa con colegas austríacos y húngaros en un proyecto que busca nuevos materiales para el almacenamiento de datos, tanto en casa, como en el trabajo. Materiales magnéticos ofrecen una de estas posibilidades.También España estuvo representada en los Premios Descartes 2004. En el equipo dirigido por Peter Townsend, de Gran Bretaña, científicas españolas tratan de sustituir con fotones los rayos x usados para detectar el cáncer de mama.
El cincuenta por ciento de los telespectadores cambia de canal al ver en la pantalla un programa científico. ¿Cómo acercar la ciencia al gran público y convencerlo de su atractivo? El zoólogo David Attenborough, de Gran Bretaña, o el nanocientífico alemán Wolfgang Heckl, se esfuerzan en ello desde hace varios años. También ellos figuraron entre los finalistas para el Premio Descartes de Comunicación, por la divulgación científica, otorgado en Praga por primera vez en la historia."La gente debe exclamar: ¡Es un ´Heimatsmovie´ - viaje por la patria! Oh, está bien ... Mira, ese chico camina allí por Los Alpes, qué paisaje más bonito, ¿y qué es lo que está diciendo? No lo he escuchado nunca. El paisaje es bonito de todas maneras. Este es uno de los métodos".
Así Wolfgang Heckl, que es un auténtico animador científico, explicó cómo es posible captar el interés de los ciudadanos de su país por la ciencia. ¿O prefieren la cocina? Como "Nanoschnitzel" - "Nanoescalope", presentó Heckl las visiones y la realidad de su objeto de investigación - la nanotecnología.
De ciencia ficción a ciencia realidad. El filósofo y matématico René Descartes se pondría contento.