Praga se convierte en puerta de entrada de turistas chinos a Europa
El número de turistas chinos que visitan la República Checa ha crecido desde el año 2004, cuando Praga se abrió a los visitantes del gigante asiático. Representantes de agencias de turismo chinas buscan la ampliación de la cooperación bilateral y quieren presentar la capital checa como una puerta de entrada al resto de Europa.
Europa es el segundo paradero que figura con mayor frecuencia en los itinerarios de los turistas chinos, después de otros países de Asia. La República Checa aspira a convertirse en uno de los países más concurridos por estos viajeros.
El número de turistas chinos que visitan Chequia crece constantemente, tratándose en su mayoría de personas entre 30 y 45 años de edad, y de buena situación económica, según dijo Jaromír Beránek, de la compañía consultora Mag Consulting, en declaraciones a la Radiodifusión Checa.
”El año pasado visitaron Chequia unos 80.000 turistas chinos. En comparación con el año 2009, el número se incrementó en un 28%. Se estima que después de visitar Praga y otros lugares de Chequia, cada vez más turistas chinos aprovecharán su estadía en el centro de Europa para viajar desde aquí a Viena, Bratislava, Ginebra y ciudades de Alemania”.Debido a la gran distancia entre China y Europa, los turistas chinos suelen viajar al extranjero por más de una semana. Esto ofrece amplias posibilidades al sector turístico checo y europeo de brindar servicios de alta calidad y atraer así a cada vez más clientes chinos, recalcó Mojmír Mikula, de la agencia Czechturism.
”Los turistas chinos acostumbran viajar al extranjero por unos 12 y hasta 16 días y, en vista de la gran distancia que deben superar, suelen hacer una gira por unos cuatro países. Los analistas calculan que los gastos de viaje de un turista chino oscilan entre 760 y 1.500 dólares. En Praga suelen quedarse en promedio unos 2,7 días, lo que consideramos positivo ya que en ciudades de Alemania se quedan 2,2 días y en Francia 3,3 días. O sea que Chequia dispone de un gran potencial turístico, y para los chinos Praga podría convertirse pronto en una importante puerta de entrada al resto de Europa”.
Mikula destacó que una de las premisas fundamentales para alcanzar ese objetivo es que exista una comunicación aérea directa entre Praga y Beijing. Desde hace tiempo Czechturism negocia esa posibilidad con varios ministerios y las Aerolíneas Checas.No obstante, la crisis y los consiguientes problemas en el transporte aéreo aplazaron la solución del asunto. El representante de Czechturism afirma sin embargo que el proyecto cuenta actualmente con el respaldo de las autoridades oficiales checas, por lo que su solución podría ser cuestión de un par de meses.