¿Por qué las pulgas están felices?

Blecha

¡Hola amigos de Radio Praga! ¿Sabían que la lengua checa es todo un jardín zoológico? El mundo animal se refleja en muchas metáforas y modismos, unos más justificados que otros, y en nuestro minicursillo de checo les presentaremos algunos de ellos.

Blecha
Estoy feliz como una pulga -jsem šťastná jako blecha-, porque por fin la primavera está por venir -jaro přichází-.

Sí, ya era hora -už bylo načase-.¿Pero qué tiene que ver una pulga con la felicidad -štěstí-? Si todo el mundo las odia -všichni je nenávidí-…

Esa es una metáfora checa de toda la vida. A lo mejor se ha inventado porque a las pulgas -blechy- les hace sentir felices -šťastné- si pueden molestar -obtěžovat- a otros.

Pues no me has aclarado nada. Tampoco entiendo por qué se dice en checo que alguien es vago como un piojo -je líný jako veš-. Si el pobre animal tiene tanto trabajo recorriendo las cabezas y fastidiando a la gente.

Klíště,  foto: Bára Kmentová
Tienes razón -máš pravdu-, este modismo ya no está tan justificado. Hablando de insectos -hmyz-, creo que la metáfora con más sentido es la que dice de alguien que está dando la lata que es pesado como una mosca -otravný jako moucha- o que uno se pega al otro como una garrapata -drží se jako klíště-.

De eso no hay duda -o tom není pochyb-. Resumiendo las metáforas checas, parece que la vida más dura aquí la llevan los perros -psi-. Por ejemplo, hace una semana hizo un frío como en una perrera -zima jako v psírně-, de una comida muy sosa se dice que no se la comería ni un perro -to by ani pes nežral- y si surge un problema y no sabemos en qué está exactamente, nos preguntamos ¿dónde está el perro enterrado -kde je zakopán pes-? Y como si fuera poco, a una persona que trata mal a los demás también se la compara con ese animal diciéndose -je na lidi jako pes-.

Bueno, por algo se habrá inventado el refrán -přísloví- como es el amo, tal es su perro -jaký pán, takový pes-, expresando lo mismo que el proverbio de tal palo tal astilla. Parece que la única metáfora positiva refiriéndose a esos animales es ser fiel como un perro -být věrný jako pes-. Pero yo ahora mismo tengo un hambre de lobo -mám hlad jako vlk- porque llevo todo el día trabajando como un caballo -dřu jako kůñ-.

Kráva,  foto: Miloš Turek
¿Qué estás diciendo -co to povídáš-? Si acabas de merendar. Si sigues así, al final te pondrás como una vaca.

Si te refieres a que me pondré gorda, pues en checo se dice que uno es gordo como un cerdo -tlustý jako prase-. Mientras que si llamas vaca -kráva- a una chica, no sé si te lo perdonará -odpustí-, dado que es un insulto -nadávka-. En el mejor caso me contestaría que soy descarado como un mono -drzý jako opice-, o sea, un caradura.

Mientras que si me dices que tienes un mono -máš opici- eso quiere decir que estás borracho.

Un mono es lo que a lo mejor tuvo el que se inventó la metáfora checa que expresa lo mismo que no hagas una montaña de un grano de arena. Es que en checo decís no hagas del mosquito un camello -nedělej z komára velblouda-. ¿A quién se le puede ocurrir algo tan extraño? Lo cierto es que entre los checos es una metáfora muy popular.

Vrabec,  foto: Bára Kmentová
Ya, es que nos gustan cosas extrañas. Bastantes comparaciones hay también con el mundo de las aves -ptáci-. Por ejemplo, de los ladrones -zloději- decimos que roban como una urraca -krade jako straka-y de las personas que comen poco, que comen como un gorrión –jíst jako vrabec-, lo que me recuerda que ahora que te veo tan despeinado -rozcuchaný-, te digo que tienes en la cabeza un nido de gorriones -máš na hlavě vrabčí hnízdo-.

¡Qué amable eres -ty jsi tak milá-! Venga, mejor volvamos a trabajar porque si seguimos hablando así aquí en la oficina, no haremos nada y acabaremos pobres como ratones de iglesia -chudí jako kostelní myši-.

El que no se ha quedado pobre es el idioma checo, amigos, porque es una lengua que está rica en modismos, así que en una de las próximas ediciones aprenderemos todavía un poco más. Hasta la próxima.