Petr Pavel contará con un arquitecto para renovar el Castillo de Praga
El nuevo presidente electo, Petr Pavel, planea “cambios radicales” en el Castillo de Praga. El prestigioso arquitecto Josef Pleskot estará al frente del proyecto.
El recién elegido presidente de la República Checa, Petr Pavel, ha anunciado su intención de ejercer el cargo de una forma más “civil” y adaptada al siglo XXI que su predecesor. En un intento por diferenciarse de Miloš Zeman, Pavel ha anunciado que no tiene previsto residir en el Castillo de Praga y que su administración sólo ocupará una pequeña parte del edificio.
En cuanto al resto de las instalaciones, Pavel ha prometido “cambios radicales”. Las propuestas del nuevo jefe de Estado pasan por abrir el Castillo de Praga al público y contratar a un arquitecto para su renovación.
El elegido para llevar a cabo el proyecto ha sido el famoso arquitecto checo Josef Pleskot, anunció Pavel.
“Ya he hablado de ello con Josef Pleskot y me complace decir que está dispuesto a asumir el reto y que tenemos una visión común. Hemos hablado de varios proyectos, incluidos posibles cambios en el Castillo de Praga, pero es demasiado pronto para hablar de ellos por ahora”.
Para Pleskot, esta no sería la primera vez trabajando en el Castillo de Praga. Ya lo hizo durante la presidencia de Václav Havel, que el arquitecto recuerda como una época de “apertura y conexión”. Entonces se encargó de la aplaudida reconstrucción del Foso de los Ciervos y del túnel bajo el Puente de la Pólvora. Según Pleskot, el Castillo de Praga tiene mucho más que ofrecer de lo que parece a simple vista y su intención es aprovechar al máximo todos los espacios.
“Podríamos transformar y abrir partes ocultas, no utilizadas e incluso olvidadas del recinto del Castillo de Praga. De esta forma podrían usarse para encuentros culturales, reuniones y debates. Estas zonas aportarían una nueva calidad a los encuentros entre personas. Hay muchos lugares que hay que considerar y revisar”.
Después de Havel, el Castillo de Praga ha estado cerrado al público durante dos décadas. Tanto Václav Klaus como Miloš Zeman decidieron permitir visitas solo en ocasiones especiales, por lo que la propuesta del nuevo presidente es para muchos motivo de alegría, como para el arquitecto e historiador Zdeněk Lukeš.
“Es bueno que el Castillo de Praga tenga su propio arquitecto. Por supuesto, depende de cada presidente decidir si quiere uno. Masaryk lo quiso, Beneš y Novotný también, pero otros no. La última vez que el Castillo de Praga contrató a un arquitecto fue en la época de Havel. Eligió a Bořek Šípek, que dejó su sello inconfundible en los interiores del Castillo de Praga. El arquitecto esloveno Jože Plečnik trabajó bajo el mandato del presidente Masaryk y su obra en el Castillo de Praga es muy admirada hasta el día de hoy. Eduard Beneš eligió al arquitecto Pavel Janák, cuyo trabajo de reconstrucción también se considera un gran éxito”, opina Lukeš.
Y aunque no está claro cómo se materializarán los planes de Pavel para el Castillo, por el momento el nuevo presidente anima a que los arquitectos encargados del proyecto piensen a lo grande, dice.
“Durante mi mandato me gustaría apoyar una arquitectura más atrevida. Creo que nuestros arquitectos tienen mucho que ofrecer y al contenernos estamos perdiendo la oportunidad de construir algo excepcional que atraiga a turistas y a otros arquitectos del mundo y nos haga sentirnos orgullosos”.
Queda por ver cómo afrontará Josef Pleskot el reto y qué cambios concretos experimentará el Castillo de Praga en los próximos cinco años.
De las obras de Josef Pleskot
Relacionado
-
Lugares de Praga con Historia
El Santuario del Niño Jesús de Praga, la colina de Vyšehrad o el Barrio Judío son algunos de los puntos más visitados de la capital checa.