Perros checos adiestrados en detección de drogas pertenecen a la élite mundial
En la República Checa se adiestran unos de los mejores perros en la búsqueda de drogas de todo el mundo. Últimamente, esos campeones han cosechado éxito en América Latina y siguen triunfando a lo largo del planeta.
En aproximadamente tres meses de adiestramiento, los animales aprenden a distinguir entre unas 8 sustancias como la marihuana, el éxtasis o la cocaína, entre otras. Curiosamente, unos perfectos buscadores de droga pertenecen a razas de estatura baja como los Russel Terriers, ya que su tamaño les permite registrar espacios restringidos, como los portaequipajes de autobuses o los aire acondicionados. Según reveló uno de los instructores, Jan Pleskač, todas las razas pasan por un adiestramiento idéntico y más que el tamaño importa lo jugetón que es el perro.
“Todo se realiza a través de un juego. Al principio se le enseña al perro a encontrar su juguete favorito. En cuanto lo aprende, pasamos a la segunda fase que consiste en añadir al juguete el objeto de interés, sean drogas, tabaco o armas”.
Los perros adiestrados en Heřmanice ayudan a descubrir drogas también en varios países de América Latina como Bolivia, Ecuador y el Perú, de donde, según estimaron los aduaneros, llegan a la República Checa aproximadamente unos 850 kilógramos de cocaína al año, de los que se consigue detectar y embargar solo decenas de kilos. La semana pasada en el Perú, un pastor alemán adiestrado en Heřmanice contribuyó a la lucha antidroga al detectar en el aeropuerto tres maletas llenas de cocaína. El adiestramiento de perros es financiado por la República Checa, que como parte del programa también invita a los guías de perros extranjeros a compartir su experiencia.