Perdura la tensión con la embajada de China en Praga
El Gobierno checo no cometió ningún error en el caso del operador de telefonía móvil chino Huawei. Declaró a la Televisión Checa el primer ministro, Andrej Babiš, y agregó que el embajador chino había mentido sobre los detalles de la reunión mantenida por ambos en diciembre.
La polémica sobre las tecnologías de telecomunicaciones chinas Huawei, que pueden representar un riesgo para la seguridad nacional, ha vuelto a las primeras páginas de la prensa checa.
En un programa de debate de la televisión pública, el primer ministro Andrej Babiš insistió en que su Gabinete no cometió ningún error y recordó que Chequia es un país libre.
“El Gobierno checo no cometió error alguno. Somos un estado independiente y soberano. El señor embajador informó de manera poco habitual sobre la reunión mantenida. Como Estado tomamos muy en serio las advertencias de la Agencia Nacional de Seguridad Cibernética”.
La Agencia Nacional de Seguridad Cibernética y de Información (NÚKIB) presentó un informe en el que alertaba que los operadores de telefonía móvil Huawei y ZTE pueden representar un riesgo para la seguridad del país. Las tecnologías utilizadas por estos pueden ser aprovechadas para actividades de espionaje.Tras una reunión del embajador de la República Popular de China, Zhang Jianmin, con Babiš en diciembre, la misión diplomática escribió en su perfil de Facebook que "La parte china toma nota de los esfuerzos del Gobierno checo encaminado a corregir los errores, y espera que la parte checa tome medidas para evitar la repetición de casos similares y proteja efectivamente los derechos e intereses legítimos de las compañías chinas".
El primer ministro Andrej Babiš ha reiterado que su Gabinete prestará atención a las recomendaciones de la Oficina Nacional de Seguridad Cibernética.
“Queremos eliminar y localizar los riesgos que pueden surgir a partir del momento en que se abuse de dichas tecnologías. Por supuesto que tomaremos medidas para que esto no ocurra”.
El portavoz de la Agencia de Seguridad Cibernética, Radek Holý, subrayó que los usuarios comunes y corrientes no deberían sentirse amenazados, a diferencia de aquellas personas que trabajan con informaciones sensibles.
“El riesgo para la seguridad aparece cuando se utilizan dichas tecnologías como instrumento de trabajo. Ya sea en el caso de empresarios que trabajan con informaciones sensibles, o en el caso de un funcionario público de alto rango”.
De acuerdo con el experto es necesario que el oficialismo cambie el sistema de licitaciones públicas. Resulta que el criterio predominante es el precio más bajo, dejando de lado la calidad y los eventuales riesgos para la seguridad. Los teléfonos chinos Huawei son utilizados en varios ministerios e instituciones públicas checas.