Pavel Nedvěd acuña su moneda de oro
Pavel Nedvěd es otro de los futbolistas checos, cuyo rostro ha sido acuñado en una moneda de oro por la empresa de Jablonec nad Nisou. La ex estrella de la Juventus se sumó al proyecto Las Leyendas Checoslovacas de Fútbol que se propone ofrecer ayuda financiera a los ex jugadores internacionales.
Nedvěd ve su cara hinchada
Pavel Nedvěd, el Balón de Oro 2003, naturalmente no puede faltar en el All Star histórico del fútbol checo, acuñado en una serie de monedas fabricada por la empresa Česká mincovna de Jablonec nad Nisou.
El capitán de la selección checa, con la que logró la plata y el bronce en las Eurocopas de 1996 y 2004, respectivamente, se encargó en persona de acuñar este martes una de las monedas con su rostro en la fábrica situada en Bohemia del Norte.“Es una sensación extraña ver tu propia cara en una moneda. Naturalmente, es un gran honor, estoy orgulloso. La moneda me gusta. La imagen es bonita. Me reconozco, soy yo, aunque me parece que salí un poco hinchado”, dijo entre risas.
La serie de monedas con las leyendas del fútbol nacional surgió gracias a la Fundación de Internacionales, presidida actualmente por Antonín Panenka.
“El objetivo de nuestra fundación es ayudar a los futbolistas que jugaron con la selección nacional como mínimo un partido. Esa es la única condición. Muchos de ellos en el pasado no pudieron ganarse tanto dinero con el fútbol para pasar una vejez digna”, indicó el autor del famoso penalti en la final de la Eurocopa de Belgrado en 1976, que garantizó a la selección checoslovaca su único título europeo.
Nedvěd es el penúltimo del once, falta Koller
La fundación, surgida hace 16 años, ha repartido entre los ex futbolistas más de 665.000 euros. Además de ayuda financiera, les ofrece también apoyo en cuanto a tratamientos médicos, operaciones, etc.Pavel Nedvěd se alegró de poder sumarse al equipo integrado por ídolos como Antonín Panenka y Josef Masopust, Balón de Oro y finalista del Mundial de 1962.
“Es fantástico. De pequeño he leído muchos libros sobre estos legendarios futbolistas. Siempre he deseado ser como ellos y hoy puedo estar aquí al lado de Antonín Panenka y estoy orgulloso de poder ayudarle con este proyecto. O sea ayudar a los futbolistas que jugaron en las épocas anteriores y no tuvieron la suerte de ganar tanto dinero. La idea es perfecta, gracias a todos”, señaló.
La serie de monedas con el once de las leyendas del fútbol checo ya está casi completa, según indicó Aleš Brix, director comercial de la Casa de la Moneda de Jablonec nad Nisou.
“Pavel es el décimo jugador del once de los mejores jugadores de las últimas tres generaciones que elegimos en colaboración con la Fundación de Internacionales de Fútbol. Para completar el once nos falta hacer la moneda del delantero Jan Koller”, mencionó.
Mirando con optimismo hacia el futuro
Pavel Nedvěd ganó dos títulos en la Serie A con la Juventus de Turín, en 2002 y 2003. El actual vicepresidente de La Vieja Señora se mostró optimista en cuanto a la nueva generación de futbolistas checos.
“Creo que nos está creciendo una buena generación futbolística. Varios jóvenes tienen el potencial de convertirse en estrellas mundiales. Solo hay que darles tiempo. Pero no voy a revelar nombres concretos para no aumentar su precio en el mercado. Eso no se hace”.Al escuchar sus palabras a todos se les ocurre de inmediato el trío checo que juega actualmente en la Serie A: Patrik Schick, que milita en el Sampdoria, Jakub Jankto, del Udinese, y Ladislav Krejčí, de la Bolonia.
“Los tres rinden perfectamente, tanto Krejčí como Schick y Jankto han encarrilado muy bien su trayectoria. Puede ser que en el futuro fichen por otros clubes y logren una carrera aún más brillante. Los tres muestran muy buen nivel y ayudan a que los agentes centren su atención en Chequia. Eso es positivo”.
La Furia Checa, como apodó a Nedvěd la hinchada italiana, subrayó que el que se imponga en la Serie A triunfará en cualquier otra liga.
“La Serie A es muy difícil desde el punto de vista de la táctica. En caso de que estos jóvenes aprendan a jugar en Italia, podrán dedicarse al fútbol en cualquier otra parte del mundo sin miedo”, insistió.
La Sub-21 checa da esperanza
El ex centrocampista destacó además el buen rendimiento de la selección Sub-21 de la República Checa que se clasificó inesperadamente para la Eurocopa que se disputará este año en Polonia.
“La Sub-21 hizo un trabajo fantástico. El entrenador Vítězslav Lavička logró formar un equipo compacto que podría lograr muy buen resultado en el campeonato. Cruzo los dedos por ellos”.Por otro lado, se mostró un poco preocupado por la crisis actual del Sparta de Praga, con el que ganó dos títulos ligueros en 1994 y 1995, y apreció la racha de su eterno rival, el Slavia.
“Para mí es difícil decirlo, pero el Slavia ha creado un equipo muy fuerte liderado por un entrenador muy bueno. Han hecho un gran trabajo y ahora cosechan los frutos. La lucha por el título será dura, pero ellos tienen buenas posibilidades de ganar. La situación del Sparta por el momento no es muy buena. En el equipo hay muchos jóvenes que necesitan tiempo. Creo que deberían cambiar su estrategia en la nueva temporada”.
Ahora Nedvěd espera impaciente el enfrentamiento de su Juventus contra el Barcelona en los cuartos de final de la Champions League.
“En cuanto al Barcelona tengo una sensación ambigua. Hace dos años caímos ante ellos, pero recuerdo mi carrera activa, cuando los derrotamos. Puede pasar cualquier cosa, aunque es uno de los mejores equipos del mundo, creo que los partidos serán muy apretados. En la Champions uno siempre necesita un poco de suerte, porque deciden detalles”, mencionó.
La Juventus desea repetir su triunfo en la Champions de 1996. La última vez llegó hasta la final del torneo hace dos años donde cayó ante el Barcelona por 1-3.
El once de las leyendas checoslovacas de fútbol:
Viktor; Lála, Miroslav Kadlec, Dobiaš; Poborský, Masopust, Panenka, Nedvěd; Kadraba, Koller, Nehoda.