Parque histórico en Moravia del Norte

La República Checa está sembrada de huellas de las épocas pasadas. Los bosques ocultan románticos restos de castillos y fuertes semiderruidos y la maleza cubre vestigios de pueblos medievales abandonados. El ex administrador del castillo de Sovinec, en Moravia del Norte, Petr Schafer ha decidido utilizar estos elementos y edificar un parque histórico en medio de las florestas de su región, vírgenes desde el punto de vista turístico.

El parque histórico medieval está surgiendo en Moravia del Norte, en el seno de los bosques, donde se encuentran los restos del desaparecido pueblo de Hutov. Hoy en día es una comarca muy poco visitada.

Petr Schafer planea que en los próximos años surgirán en el areal un campamento de caballeros, un pequeño fuerte en la colina, un molino de viento, una posada y talleres de artesanos. "Aprovecharemos la naturaleza pintoresca, las canteras de pizarra inundadas, los antiguos pozos, los manantiales del bosque y los restos de las construcciones del pueblo medieval abandonado para mostrar a los visitantes cómo vivían nuestros antepasados en la Edad Media," explica Schafer. Al igual que en el Medioevo, en el parque histórico no habrá electricidad y en todas las construcciones y labores artesanales y faenas agrícolas se utilizarán los procedimientos medievales.

El pasado fin de semana llegaron al naciente parque histórico en los bosques de Moravia del Norte los primeros visitantes. Centenares de personas fueron atraídas por las Jornadas de Miel, alimento muy utilizado en Chequia durante la Edad Media. Por ejemplo, la miel fermentada era la bebida con la que se embriagaban los checos medievales. Tras saciarse con pasteles de miel, los visitantes del parque histórico en la naturaleza podían contemplar el trabajo de herreros, cesteros y talladores y competir en tiro de arco y de ballesta.