Nuevos documentos reabren la investigación de la misteriosa muerte de Jan Masaryk en 1948

El muerte Jan Masaryk en el patio de Černínský palác

La Policía anunció la reapertura de uno de los casos de mayor relevancia para la historia y la política checa del siglo XX, la muerte del ministro de Relaciones Exteriores Jan Masaryk en marzo de 1948 tras caer desde una ventana de su apartamento. Documentos recientemente obtenidos de las inteligencias estadounidense, francesa y británica aportan nuevos testimonios que apoyan la teoría del asesinato.

Jan Masaryk | Foto: APF Český rozhlas

Jan Masaryk, ministro de Relaciones Exteriores de Checoslovaquia, apareció muerto en la madrugada del 10 de marzo de 1948, coincidiendo con el ascenso al poder del Partido Comunista en el país. Había caído desde la ventana de su apartamento en el Palacio Černín, sede del Minsiterio. La versión oficial de las recién nombradas autoridades comunistas fue la del suicidio. Pero desde el primer momento las teorías que hablaban del asesinato y, de hecho, de una nueva defenestración para un cambio de poder, fueron tomando fuerza.

El verano pasado, el ministro Jan Lipavský logró de la diplomacia estadounidense, francesa y británica nuevos documentos que durante casi 80 años habían permanecido clasificados en sus archivos.

Documentación de la muerte de Jan Masaryk | Foto: Jan Špička

El estudio de estas nuevas pruebas, han llevado a la Policía a reabrir el caso una vez más cuando se van a cumplir 77 años del suceso, como anunció este martes Aleš Cimbala, portavoz de la Fiscalía de Praga.

“Después de una evaluación inicial de la nueva información, la Policía llegó a la conclusión de que era adecuado redactar el acta de inicio de proceso penal”.

Otras investigaciones en las últimas décadas ya se habían decantado por el asesinato, pero ninguna consiguió desechar al 100% ninguna de las otras dos opciones: accidente o suicidio. La última de estas investigaciones se cerró en 2021, pero algo ha llevado a la Policía a reabrir el caso “por sospechas del crimen de asesinato”.

¿Qué novedades aportan los documentos desclasificados?

De ello habló para el podcast de la Radio Checa Vinohradská 12 el periodista de Aktuálně.cz Jan Horák, que tuvo acceso a ellos.

Jan Masaryk y Edvard Beneš | Foto: Národní muzeum

“El despacho contiene el testimonio de un oficial estadounidense, al que supuestamente el mayordomo de Masaryk, Bohumil Příhoda, le habría contado que en la víspera de la muerte de Jan Masaryk, alrededor de las 9:10 horas de la noche, le visitaron tres hombres con los que Masaryk mantuvo una acalorada discusión. Y una de las frases que Příhoda habría escuchado gritar repetidamente a Masaryk era: ‘Esto no se lo firmaré, ustedes quieren sacármelo todo, pero esto no lo conseguirán. Solo por encima de mi cadáver’”.

El mayordomo Bohumil Příhoda llevaba unos veinte años trabajando para la familia Masaryk, primero con el primer presidente checoslovaco, Tomáš Garrigue, y después con su hijo Jan incluso en los años del exilio durante la Segunda Guerra Mundial. Este habría escuchado la discusión desde su propio apartamento, situado justo encima del piso del ministro.

Jan Masaryk | Foto: Česká televize

El testimonio de Příhoda al oficial estadounidense se habría producido el 12 de marzo de 1948, dos días después, por lo que los hechos estaban muy frescos en su memoria.

¿Pero quiénes eran aquellos hombres que visitaron la noche de su muerte a Masaryk? Eso sigue sin saberse, explica Horák.

“No se menciona su identidad, nombre o nacionalidad. Pero hablando con un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores que vio los documentos, me expuso su teoría de que teniendo en cuenta que Masaryk les gritó en checo, entre ellos debía haber, al menos, un checo. Y si sabemos que les llevó café a los tres hombres y los vio, pero según la fuente estadounidense, no los conocía, entonces, aunque fueran checos, definitivamente no pertenecían al círculo de Jan Masaryk o al Ministerio de Asuntos Exteriores”.

El apartamento de Jan Masaryk | Foto: Ondřej Tomšů,  Radio Prague International

Según la teoría del mismo funcionario del Ministerio, el documento que podían estarle exigiendo firmar podría ser su adhesión al Partido Comunista, pero esto son solo especulaciones.

El contexto de esas fechas era de extrema tensión para Masaryk, que veía el ascenso al poder del Partido Comunista como una gran amenaza para la democracia en Checoslovaquia por la que tanto se había luchado y a la que se habían comprometido por completo tanto su padre como él mismo. Enfermo y extenuado, tuvo que aceptar públicamente al nuevo gobierno entre presiones y críticas, tanto de políticos del exterior como de su propio entorno personal. Y en el Ministerio de Relaciones Exteriores ya habían comenzado los despidos fulminantes de personal de su confianza.

El mayordomo Příhoda aún fue a visitarlo una vez más después de llevarle café a las tres personas que lo visitaron. Fue la última persona de la que se tiene absoluta constancia que lo vio con vida, prosigue Jiří Horák.

“Los documentos que he estudiado dicen que fue a verlo una vez más, se supone que poco antes de medianoche. Masaryk estaba claramente alterado y asustado, temblaba y estaba pálido. Le llevó un último café. Aquella supuesta discusión con los tres hombres la escuchó desde su apartamento, y los momentos de tensión se produjeron en más de una ocasión”.

Un caso sin resolver

También para la Radio Checa, Jiří Kocián, historiador del Instituto de Historia de la Academia de Ciencias de la República Checa, expuso las primeras dudas que presenta la versión oficial del suicidio, y es que las conclusiones de la investigación se publicaron de forma inmediata ese mismo día.

La placa conmemorativa del lugar de la muerte de Jan Masaryk en el patio del Palacio Černín | Foto: Filip Jandourek,  Český rozhlas

“En la mañana del 10 de marzo, cuando se encuentra el cuerpo de Masaryk, coinciden varios relatos entre varios miembros del personal del ministerio. Hacia las seis de la mañana llaman a la Policía, que inicia la investigación y el reconocimiento de los alrededores. Sin embargo, poco después de la visita del ministro del Interior Nosek, esta es reemplazada, destituida, y los miembros de la Policía secreta comunista, la StB, toman la investigación. Y aquí, en la mañana del 10 de marzo, se concluye, en mi opinión, de manera apresurada y por motivos políticos, que Masaryk decidió quitarse la vida por la presión de los acontecimientos y la presión internacional, que le acusaba de tener una actitud positiva hacia el nuevo gobierno comunista”.

Son muchos los misterios que envuelven la muerte de Masaryk, pero los expertos piensan que deben seguir existiendo documentos secretos en servicios de inteligencia extranjeros, por lo que la historia puede volver a rescribirse varias veces.

Autores: Daniel Ordóñez , Matěj Skalický | Fuente: iROZHLAS.cz
palabra clave:
audio