Adiós al icónico vagón restaurante de los Ferrocarriles Checos
Un icónico vagón restaurante de los Ferrocarriles Checos pronto abandonará los rieles y será reemplazado por un modelo más moderno. RPI se subió a este comedor sobre ruedas para conversar con Pavel Peterka, un camarero que hace más de dos décadas presta servicio en este restaurante tan especial y apreciado por los viajeros, especialmente en trayectos a Alemania.
Un icónico vagón restaurante de los Ferrocarriles Checos está por abandonar los rieles que ha recorrido durante años. Por fuera, este vagón restaurante no sobresale mucho del resto de los vagones del operador nacional. No obstante, por dentro, una atmósfera acogedora y comida deliciosa reciben a los pasajeros que deciden visitarlo.
Numerosos medios de comunicación tanto nacionales como internacionales informaron sobre el hecho histórico y Radio Praga Internacional también se unió a ellos para vivir esta experiencia inolvidable. En esta ocasión, nos acompaña Pavel Peterka, camarero principal en los Ferrocarriles Checos y una estrella local en su ámbito por los artículos y los libros de su amigo, el escritor Jaroslav Rudiš, quien lo ha incluido en sus relatos.
“Nos encontramos en el vagón restaurante WRmz815. Fue construido en 1997, lo que significa que ahora tiene 27 años. Sin embargo, es muy bonito y práctico”.
Durante 23 años, Peterka atiende clientes en los trenes de larga distancia, especialmente las rutas a Alemania.
“Mi mamá viene de una familia de trabajadores ferroviarios. Por eso, me empezaron a gustar los trenes desde temprana edad. Sabía que quería dedicarme a este trabajo desde que era estudiante”.
El hecho de portar lentes le impidió a Peterka convertirse en conductor de trenes. Por lo tanto, decidió estudiar gestión de restaurantes con la esperanza de comenzar a trabajar como camarero para la aerolínea nacional ČSA. Sin embargo, el destino tenía otros planes para Peterka, que llegó al lugar donde realmente pertenecía. A lo largo de su experiencia como camarero principal, Peterka ha recorrido numerosas veces la línea Praga – Núremberg. Más tarde, atendió a los pasajeros que viajaban a Dresde, Berlín y Hamburgo. En el pasado, la República Checa contaba también con otras conexiones en el norte como, por ejemplo, Binz en Alemania o Aarhus en Dinamarca. Peterka ofreció más detalles acerca de sus viajes.
“Los viajes a Westerland siempre eran como un pequeño viaje de un día. Llegabas a este lugar maravilloso y luego dabas un paseo en la playa. Para los que veníamos de países sin salida la mar, como Chequia, era una experiencia sumamente especial. Incluso el viaje de Niebüll a Hindenburgdamm era algo emocionante. Siempre imaginábamos que unas olas enormes chocarían contra el tren, lo que hubiera tenido consecuencias dramáticas”.
Sin embargo, como recalcó Peterka, el drama los alcanzó donde menos esperaban. La rica experiencia del camarero incluye un descarrilamiento en la Estación Central de Berlín o el choque con un auto en un paso a nivel.
Peterka guarda también memorias más tranquilas como, por ejemplo, la enorme cantidad de libros que ha podido leer durante los largos viajes. Además, ha observado los paisajes cambiantes y hasta ha atendido al presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, cuando este viajaba a Praga en tren en 2021.
A continuación, durante la hora de almuerzo, el cocinero, también llamado Pavel, expresó su punto de vista con respecto a la decisión de retirar el icónico vagón restaurante.
“Este vagón tiene una estructura increíblemente buena. Tengo experiencia en distintos tipos de vagones, pero solamente aquí lo tengo todo a mano. Sencillamente, no hay un vagón restaurante mejor que este y esto hasta me entristece un poco. Si algo funciona bien, ¿por qué querrías deshacerte de ello?”
En un comunicado reciente, los Ferrocarriles Checos han anunciado que los viejos vagones restaurante se reemplazarán por unos más modernos. Sin embargo, estos nuevos vagones no ofrecerán comida fresca o recién preparada. Los platos, según el operador nacional, sólo se calentarán y así se servirán a los clientes. Asimismo, se reducirá la máxima capacidad de personas que puedan comer en el vagón al mismo tiempo. Los anteriores 30 lugares disponibles en el WRmz815 se disminuirán a tan sólo 18 en los nuevos ComfortJets.
Estos cambios, no obstante, han provocado sentimientos encontrados entre los pasajeros. Un matemático, que viaja frecuentemente entre Berlín y Praga expresó su desacuerdo con la actual sustitución de los viejos vagones.
“Me encantaba el hecho de que todavía sirvieran comida real aquí y que nada se calentara en el microondas. La diferencia es enorme. ¡Y lo de haber cerveza de barril! Deutsche Bahn dejaron de ofrecerla y esta es la razón por la cual no volveré a viajar con ellos nunca más”.
A diferencia de este cliente, Pavel Peterka se siente más entusiasmado y prometió que los clásicos checos de siempre, como la svíčková con knedlíky, permanecerán y esto incluye la cerveza de barril también.
Las otras buenas noticias son que los vagones históricos seguirán en servicio en el futuro, pero todavía se desconocen los detalles. Mientras tanto, se sabe que los nuevos vagones de Siemens y Škoda tardarán unos meses más en sustituir estas icónicas reliquias.
