La cerveza mantendrá su precio por el momento
Las principales productoras nacionales todavía no han anunciado cambios en el precio de la cerveza embotellada o de barril, mientras que alguna de ellas incluso ha confirmado que no aumentará.
La bebida nacional checa por excelencia, la cerveza, viene registrando aumentos de precios desde hace ya varios años, en los que los principales productores del país se vieron obligados a aumentar los precios frente a un contexto de alta inflación y aumento de los precios de la energía y materias primas.
Ahora, de cara al otoño, la buena noticia es que los propios productores han señalado que, por el momento, no entran en sus planes nuevas subidas de precios.
Por ejemplo, la cervecera estatal Budějovický Budvar, ubicada en Bohemia del Sur, sigue evaluando los costos antes de decidir sobre una posible modificación de los precios.
"Observamos de cerca la situación del mercado y analizamos continuamente los factores que puedan afectar nuestros costos. Por ahora, no podemos confirmar que estaremos obligados a subir los precios de la cerveza", indicó Barbora Povišerová, portavoz de Budvar.
Bernard, la cervecería de Humpolec en la región de Pelhřimov, también se encuentra en una situación similar.
"Estamos monitoreando la evolución del mercado, así como los precios de las materias primas y la energía, que son factores determinantes en nuestros costos de producción. Sobre esta base, decidiremos si ajustamos los precios de la cerveza", explicó Radek Tulis, portavoz de la cervecería.
Por su parte, Staropramen, en Praga, no quiso hacer comentarios sobre los posibles cambios en los precios, mientras que Pivovar Nymburk ha anunciado que no tiene planes de aumentar los precios, y Plzeňský Prazdroj, la mayor productora del país, confirmó que no subirá los precios de sus cervezas embotelladas o de barril como un gesto de apoyo a bares y consumidores.