Dos años de la caída de Bohemia Energy, la empresa que ‘dejó sin luz’ a casi un millón de checos
El derrumbe de una de las mayores proveedoras del país supuso todo un terremoto en el sector energético.
La crisis energética viene siendo uno de los grandes asuntos en clave europea y nacional en los últimos años. En esta línea, la caída de Bohemia Energy en octubre de 2021 marcó un punto de inflexión dentro del mercado checo, a la vez que supuso una suerte de prólogo del terremoto que aguardaba al sector a unos meses de la guerra de Ucrania.
"El fracaso de Bohemia Energy fue una lección para todos. Los proveedores comenzaron a contratar más seguros, junto con otras medidas para una mayor protección del consumidor, y los clientes empezaron a valorar más las marcas establecidas y la calidad del servicio, no sólo los precios bajos", señaló Jiří Gavor, director ejecutivo de la Asociación de Proveedores Independientes de Energía.
Fue un 14 de octubre cuando la compañía, uno de los mayores proveedores de energía del país por aquel entonces, anunciaba el cese de su actividad de forma inmediata. Bohemia Energy atribuyó esta drástica decisión al continuo y extremo crecimiento de los precios de la energía en el mercado mayorista. Según la propia empresa, estos se habrían triplicado con respecto al curso anterior.
Por suerte, los cerca de 900.000 clientes a los que abastecía la proveedora pudieron ser entonces atendidos por los denominados proveedores de último recurso, que incluían a empresas como ČEZ, E.ON o Innogy.
"Desde entonces, la tendencia de crecimiento de los precios de la energía se ha convertido en una caída que continuará con fluctuaciones durante varios años y, sobre todo, se ha advertido fuertemente a otros comerciantes contra tácticas comerciales similares a las de Bohemia Energy", señaló Michal Macenauer, director de estrategia de la consultora EGÚ Brno.
Tan solo un año antes del derrumbe de la energética, esta había registrado ventas por valor de más de 935 millones de euros, un 7% más que en 2019.