Yemi A. D., el primer turista espacial checo y nigeriano: “Es un sueño hecho realidad”
El famoso bailarín y coreógrafo Yemi A. D. es una de las ocho personas elegidas por el multimillonario japonés Yusaku Maezawa para viajar a la Luna en 2023 en la nave SpaceX de Elon Musk. El artista habló para Radio Praga Internacional de su cóctel de sensaciones antes de volar al espacio, el largo proceso de selección en el que se impuso a un millón de candidatos o lo que espera sacar de la experiencia.
El polifacético Yemi Ayinkemi Dele, mucho más conocido como Yemi A.D., nació en Liberec hace 41 años, de madre checa y padre nigeriano. Su trabajo como bailarín, actor, director artístico, artista plástico y, sobre todo, coreógrafo, no solo ha destacado en Chequia, donde es un habitual tanto de la televisión como en ballets del Teatro Nacional o hasta grupos de rock, por poner solo algunos ejemplos, sino que también ha trabajado en películas de Hollywood como Las Crónicas de Narnia: El príncipe Caspian. Pero lo más famoso de su obra son seguramente sus coreografías para artistas como Madonna, Rihanna o Kanye West.
Sin embargo, el año que está a punto de comenzar marcará un hito único y difícilmente imaginable en su vida. Se convertirá en el segundo checo en viajar al espacio, 45 años después de que lo hiciera Vladimír Remek en 1978, y en el primer nigeriano, después de ser elegido entre un millón de candidatos para acompañar al multimillonario japonés Yusaku Maezawa en un vuelo espacial que entrará incluso en la órbita lunar antes de regresar a la Tierra.
“Siempre he estado muy orgulloso de tener esta mezcla de raíces eslavas y nigerianas e intento proyectarlas en mi arte”.
Como contó Yemi A. D. a Radio Praga Internacional, en cuanto conoció las intenciones de Maezawa, ya no se pudo sacar el viaje al espacio de la cabeza.
“Me enteré por un amigo que me enseñó un artículo de que Yusaku Maezawa quería llevarse a varios artistas a la Luna. Eso fue hace como tres años y me intrigó mucho porque ha sido mi sueño desde niño, pero nunca imaginé que se haría realidad”.
Creatividad y compromiso
En ese momento se encontraba en Estados Unidos con una beca. Después comenzó el proceso de selección.
“En cuanto se abrió el concurso, envié el cuestionario y fui pasando una ronda tras otra. Tuve que presentar mi trabajo artístico y pasar por todo tipo de entrevistas. Fue un proceso muy largo. Mientras, creé dos proyectos distintos, así que sabía que aunque no lo lograra, valoraría toda la experiencia. La misión de Yusaku Maezawa es un sueño hecho realidad. Pide a los artistas que tengan un impacto en la sociedad y es algo que siempre he querido hacer. Siempre he estado explorando distintas formas en las que mi arte y creatividad puedan mejorar la vida de otras personas”.
Por supuesto, cuenta Yemi A. D., se enfrentó a la serie de reconocimientos y pruebas médicas más larga que uno pueda. Según iba superando las distintas fases del proceso de selección, llegó el turno incluso de conocer al propio Yusaku Maezawa, que ya voló al espacio en 2021, pasando 12 días en la Estación Espacial Internacional.
“Si hay una razón por la que esta misión tiene sentido para mí es para que los jóvenes entiendan que no importa dónde naciste, cuánto dinero tienes o cuál es tu género u orientación sexual”.
“Lo conocí en persona y fue una sorpresa muy positiva. He trabajado con diferentes personas famosas o muy ricas pero no tienen esa levedad en su ser. Y él es exactamente así. Es alegre y un soñador. Además, le encanta divertirse, hacer nuevas amistades y aprender. Vi las ganas que tenía de saber más sobre cada uno de nosotros y sobre nuestro arte y nuestro proceso creativo”.
Yemi A. D. dice que sería mejor preguntar al propio Maezawa qué fue lo que le hizo decantarse por el coreógrafo checo para semejante viaje. Pero cree que habrá sido una mezcla de facetas de su vida las que le pueden haber interesado al empresario y coleccionista de arte japonés.
“No es solo por la coreografía o la danza y el movimiento, sino por todos los distintos trabajos artísticos, desde el teatro al arte digital. Espero que se enamoraran de las coreografías y el vídeo que envié. Pero también creo que mi trayectoria vital y el hecho de haber estado trabajando y formando a jóvenes también fue importante. Llevo haciendo ese trabajo durante los últimos veinte años o así. Trabajo con niños discapacitados, inicié varios proyectos en Nigeria, becas para jóvenes bailarines en la India y ayudamos a recaudar dinero para niños con problemas auditivos. También tengo un hermano con síndrome de Down, lo que me ha acercado a los niños con distintos tipos de necesidades. Esto es algo que disfruto tanto como la creación. Así que creo que esto también se tuvo en cuenta”.
El peso de la identidad
Yemi A. D. cree que su origen mixto lo marcó profundamente como persona y, en consecuencia, también como artista.
“Esto es muy importante porque soy un niño de lo que se conoce como tercera cultura. No pertenezco a la cultura de mi madre ni a la de mi padre. Cuando voy a Nigeria, nadie cree que sea nigeriano. Cuando estoy en Chequia, nadie cree que sea checo. Los niños como yo siempre tenemos un momento de crisis de identidad, porque no nos fue asignada una identidad desde el principio. Tenemos que buscarla y aceptar que la gente te cuestiona y duda de ti. Esto crea en ti una cierta resiliencia y tiene un impacto no solo en quién eres, sino en lo que creas. Siempre he estado muy orgulloso de tener esta mezcla de raíces eslavas y nigerianas e intento proyectarlas en mi arte. No quiero reciclar movimientos tradicionales o a otros artistas, yo pienso en lo que significa”.
¿Qué siente el artista al convertirse en el primer turista espacial de la República Checa?
“Estoy muy orgulloso y siento que es un privilegio representar a un país que tuvo un hombre en el espacio hace más de 40 años. Es también un gran privilegio hacerlo por Nigeria. Si hay una razón por la que esta misión tiene sentido para mí es para que los jóvenes entiendan que no importa dónde naciste, cuánto dinero tienes o cuál es tu género u orientación sexual. Lo único que importa es si eres creativo o estás dispuesto a esforzarte en ello. Si lo haces, da igual quién seas, puedes desear lo que quieras, que lo puedes conseguir”.
Una incitación a la creatividad
El vuelo aún no tiene fecha concreta, pero debería realizarse en 2023. Yemi A. D. ya se prepara física y mentalmente. El bailarín dice estar deseando empezar con el entrenamiento profesional y entender cada pieza de la nave espacial que lo llevará hasta la órbita lunar. Pero también de entablar relación con sus compañeros de viaje. Precisamente el efecto que tenga el vuelo espacial en estos artistas que han destacado por su creatividad es lo que quiere ofrecer al mundo Maezawa con el proyecto.
“Mentiría si dijera que no tengo miedo. En mi vida siempre he tomado riesgos y creo que la razón por la que he llegado donde estoy ahora es porque estaba dispuesto a asumirlos”.
“Tengo muchas ganas de colaborar con el resto de miembros de la tripulación. Creo que lo mejor de esta misión es, aparte de volar a la Luna, las personas con las que volaré. Aparte de Yusaku Maezawa, es un gran grupo de gente, con actores, cantantes, fotógrafos y cineastas. No sé qué pasará, pero sé que será un reto y que hará mi vida mejor”.
Estos compañeros de viaje serán el youtuber norteamericano Tim Dodd, el músico también estadounidense Steve Aoki, la fotógrafa irlandesa Rhiannon Adam, el actor indio Dev Joshi, el fotógrafo libanés Kareem Iliya, el documentalista estadounidense Brendan Hall y el rapero coreano T.O.P.
Yemi A. D. reconoce también cierto nerviosismo ante la idea de abandonar durante unos días el planeta Tierra.
“Diría que es una tormenta emocional de muchos niveles y aspectos. Todavía me parece surrealista. Pero solo me siento bendecido por tener esta oportunidad y orgulloso y agradecido a la vez. El miedo también está presente. Mentiría si dijera que no tengo miedo. En mi vida siempre he tomado riesgos y creo que la razón por la que he llegado a donde estoy ahora es porque estaba dispuesto a asumirlos y eran riesgos que valía la pena tomar”.
En cualquier caso, defiende que, a pesar de lo que muchos han expresado, es un viaje con sentido. Se trata de la primera vez que serán artistas quienes viajen al espacio y vean desde allí la Tierra. Si eso disparará su inspiración, es algo que conoceremos con el tiempo.
