Desarrollan en Brno test de COVID más rápidos que los PCR y más fiables que los de antígenos

Filip Pardy y Kristýna Brzobohatá, foto: CEITEC

Expertos del Instituto CEITEC de Brno ya están presentando los nuevos test que han desarrollado para detectar el coronavirus. Consiguen una mayor precisión que los de antígenos, son más rápidos que los PCR y, además, son más asequibles porque no requieren de gran equipamiento.

Empleando el método de amplificación isotérmica (RT-LAMP), el CEITEC, el Instituto Centroeuropeo de Tecnología, de la Universidad Masaryk de Brno ha conseguido desarrollar unos nuevos test de coronavirus que simplifican el proceso con un alto grado de fiabilidad. Dicho método reconoce el virus sin necesidad de aislar el ARN.

La realización de la prueba es en apariencia como la de los otros métodos: un hisopo es introducido hasta la cavidad nasofaríngea para extraer la muestra. Esta se calienta a 65ºC para que se reproduzca, esto es, se amplifique el material genético del virus. En menos de una hora, el resultado se reconoce a simple vista, explica a la Radio Checa Filip Pardy, uno de los científicos del instituto CEITEC de Brno que han desarrollado el método.

Filip Pardy y Kristýna Brzobohatá,  foto: archivo CEITEC

“La reacción produce un cambio de color, gracias a lo que el resultado se reconoce a simple vista. Tiene un colorante muy sensible, y cuando la reacción se da con éxito, pasa de un color rosado a uno azulado. El trabajador que haga los test, lo pone sobre una superficie blanca bajo una luz blanca y lee el resultado sin problemas”.

Aunque los test PCR que se usan desde hace décadas son insuperables en fiabilidad, los resultados de las pruebas LAMP, especialmente en las muestras con mayor cantidad de virus, son comparables, prosigue Filip Pardy.

“La sensibilidad es, por supuesto, algo más baja que la de los test PCR. Esto es normal en los test en los que no se aísla el ARN. Pero tiene la ventaja de que la reacción es más sencilla y directa. El resultado se da en 45 minutos”.

No tan fiables, pero sí más sencillos y, algo importante, mucho más económicos. Para Filip Pardy, por su sencillez, se trataría de una buena opción para espacios que en un principio no estaban pensados para albergar este tipo de pruebas que ahora se realizan de forma generalizada en Chequia en las empresas y, en breve, seguramente también en las escuelas.

“Tenemos un maletín en el que cabe dentro todo lo necesario para hacer los test. Aunque es necesario que los realice alguien que tenga experiencia de laboratorio o de algún tipo. No es un test que pueda hacerse uno a sí mismo. Sería una opción para empresas o laboratorios que no estén tan bien equipados. El método se caracteriza por necesitar un equipamiento de pocos miles de euros y no decenas de miles de euros, como los PCR”.

El laboratorio Genomika del Instituto CEITEC de Brno recibió el año pasado una beca de la Agencia de Tecnología de la República Checa para el desarrollo de este proyecto. Ahora, los científicos están en conversaciones con dos empresas interesadas en la adquisición de la licencia para empezar a producirlos. Unos test parecidos ha desarrollado y validado el centro BIOCEV de la Universidad Carolina de Praga y la Academia de Ciencias, que ahora están intentando adaptarlo para ser capaces de sacar el resultado de una muestra de saliva, lo que supondría una simplificación mucho mayor aún.