Súbitamente aumentó el precio de los carburantes en la RCh
Un "gran salto" dio este último fin de semana el precio de los carburantes en la República Checa. Un litro de gasolina llegó a costar alrededor de un euro y 13 centavos, el máximo en los últimos diez años y su precio podría seguir aumentando.
"Es una catástrofe." "Claro que no es para reírse". "La situación se torna cada vez peor", fueron las reacciones más frecuentes de los checos que, al enterarse del encarecimiento de los combustibles, llegaban a las gasolineras con la esperanza de que todavía alcanzarían a cargar gasolina a un precio más moderado.
Representantes de empresas elaboradoras de crudo anunciaron que el aumento se debe a la situación en los mercados internacionales. Los analistas afirman que el precio de la bencina podría llegar a un euro con veinticuatro centavos, o sea a más de 36 coronas checas. Tomando en cuenta el poder adquisitivo de la población, es un precio bastante elevado.El opositor Partido Cívico Democrático quiere presentar este mes en la Cámara Baja un proyecto de enmienda para reducir el impuesto a los carburantes. Vlastimil Tlustý, presidente de la facción parlamentaria de ese partido, afirma que el más beneficiado por el alto costo de los carburantes es el Estado.
"Nuestra enmienda se propone fijar el impuesto al consumo en ese renglón de manera más justa. Actualmente el Estado se beneficia sobremanera a expensas de los ciudadanos, ya que a las arcas estatales van las dos terceras partes de los impuestos".La Socialdemocracia checa, el partido más fuerte de la coalición gubernamental, considera que la oposición sólo persigue ganar puntos de cara a las próximas elecciones parlamentarias de 2006. El primer ministro, Jirí Paroubek, señaló que el Gobierno prefiere compensar el brusco aumento del precio de los carburantes en forma de incremento de algunas contribuciones sociales.