“No somos estúpidos, sólo boicoteamos la prueba”
Continúa la lucha entre el Gobierno y los sindicatos por los salarios de los empleados públicos; Pavel Bém evalúa sus ocho años al frente del Ayuntamiento de Praga y los motivos del bajo rendimiento de los estudiantes en el ensayo general de bachillerato. Estos y otros temas comenta la prensa checa de este martes.
El Gobierno y los sindicatos se reunieron este lunes para volver a discutir la reducción de los sueldos y otras reformas planeadas para 2011 en el sector público.
Los sindicatos critican especialmente la propuesta gubernamental para anular el incremento salarial acorde a los años trabajados.
El primer ministro, Petr Nečas, planteó la semana pasada posponer algunas reformas para 2012, no obstante, los sindicalistas no aceptaron el compromiso.A pesar de las discordias, Nečas insiste en la necesidad de ahorrar cerca de 470 millones de euros en los sueldos de los empleados estatales. “La reducción de los salarios en un 10 por ciento sigue siendo la prioridad del Gobierno”, sostuvo el primer ministro en la reunión de este lunes.
Según Hospodářské Noviny, la huelga es inevitable, sólo falta decidir la fecha y la forma de la protesta.
Los estudiantes que participaron en el ensayo general de bachillerato estatal unificado boicotearon la prueba, informa Lidové Noviny.
Sin preparativos, sin nerviosismo y sin ilusiones rellenaron las columnas correspondientes. No es de extrañar que más del 30 por ciento de ellos no superara el examen.El alto porcentaje de fracasos ha asustado a algunos políticos. El jefe del Gobierno, Petr Nečas, pide al ministro de Educación, Josef Dobeš, un análisis detallado de los resultados.
Éste sostiene, sin embargo, que el bajo rendimiento no es motivo para cancelar o posponer el proyecto e insiste en su introducción en 2012, indica el matutino.
Mladá Fronta Dnes publica una entrevista con el alcalde mayor de Praga, Pavel Bém, que después de ocho años abandona su puesto.
Bém valora positivamente el periodo de su actuación en el Ayuntamiento, aunque reconoce algunos fallos.
Bém dice en la entrevista que sea quien sea su sucesor, asumirá el cargo en un buen momento. “Praga, a diferencia del Estado, no está endeudada. Durante la crisis incluso logró pagar casi una tercera parte de su deuda histórica”, sostiene el político en Mladá Fronta Dnes.
Y al final un sondeo de la agencia STEM sobre la situación económica de los hogares checos, cuyos resultados publica el diario Právo.
De la encuesta se desprende que el 37 por ciento de las familias checas tiene problemas para pagar los gastos cotidianos. En su mayoría, se trata de hogares donde uno o los dos adultos están sin trabajo.También la educación juega un papel importante. El 61 por ciento de los checos con estudios universitarios no tiene problemas financieros, mientras que entre las personas sin estudios, sólo es el 27 por ciento.
El nueve por ciento de los checos, es decir unas 900 personas, está amenazado con la pobreza, es decir, su ingreso es inferior al 60 por ciento del sueldo habitual en el país, indica Právo.