Desaparecen los criaderos de cerdos en Chequia

Un gran número de criadores checos de cerdos están decididos a abandonar esta labor, por temor a la bancarrota. La crianza de porcinos en el país se ha vuelto poco rentable. La carne de puerco de producción nacional desaparece poco a poco de los comercios y es reemplazada por carne importada más barata de otros países comunitarios.

La carne porcina tiene un lugar privilegiado en la cocina tradicional checa. Su consumo anual per cápita es de unos 50 kilos aproximadamente.

A pesar de ello, los criaderos de cerdos locales van desapareciendo y la carne porcina de producción nacional que se vende en los comercios es sustituida cada vez más por carne y productos derivados del cerdo importados. Esto se debe a que los gastos para la cría de un porcino en Chequia son un 30% superiores a los de otros países de la Unión Europea, advirtió Petr Havel, analista agrícola.

”El futuro de la cría de porcinos en la República Checa depende mucho de los propios ganaderos. Deben lograr que sea más efectiva, que las cerdas tengan más crías. También es necesario optimizar las porciones alimenticias a los puercos, para que los criadores nacionales puedan competir en el rendimiento con sus colegas extranjeros”.

Petr Havel
En los años 90 se criaban en el país casi cinco millones de cerdos, pero su número fue reduciéndose paulatinamente y en 2011 alcanzó apenas unos dos millones de cabezas. Este es el menor número de porcinos registrado en los criaderos nacionales desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.

El Ministerio de Agricultura repartió unos 12 millones de euros en subvenciones a los ganaderos checos a fin de prevenir la desaparición de las crianzas nacionales de cerdos. Los criadores afirman sin embargo que la ayuda del Estado es insuficiente para compensar las pérdidas.

Mientras que hace unos años el país era autosuficiente en la producción de carne de cerdo, actualmente la situación es muy diferente, sostiene Jan Žáček, portavoz del Ministerio de Agricultura.

”Antes de la entrada en la Unión Europea, Chequia era totalmente autosuficiente en la producción de carne porcina. Actualmente los criaderos de cerdos locales cubren el 60% del consumo nacional”.

Los proyectos del Gobierno para apoyar la cría nacional de porcino no han dado el resultado deseado hasta el momento. Las crías siguen desapareciendo y la carne de cerdo se importa a Chequia especialmente desde Alemania, Dinamarca y Holanda. La mayoría de los productos de carne porcina como jamón, salchichas y salchichones también se fabrica de carne importada.