Pacientes checos son los primeros en utilizar marcapasos sin electrodos
Un equipo de expertos checos y estadounidenses realizaron una operación para implantar el primer marcapasos inalámbrico de la historia. Los médicos han realizado la intervención con éxito en 16 pacientes en el hospital Na Homolce de Praga.
Los marcapasos utilizados hasta ahora se colocan debajo de la clavícula y los impulsos se transfieren al corazón por medio de electrodos, explicó el médico jefe del Departamento de Cardiología del hospital Na Homolce, Petr Neužil.
“El nuevo tipo de marcapasos no necesita electrodos. Se implanta desde la vena del muslo por medio de una punción quirúrgica, así que no hay que hacer ningún corte. El aparato se coloca con un catéter en la punta del ventrículo derecho del corazón. Una vez verificados todos los parámetros eléctricos y que su funcionamiento es correcto, el aparato se separa del portador y permanece en el corazón entre cinco y ocho años, según la vida útil de la batería”.La implantación del nuevo marcapasos es mucho más fácil que las operaciones actuales. El proceso dura aproximadamente un cuarto de hora. El médico es capaz de realizar la operación sin asistentes y sin tener que anestesiar al paciente. Además, la intervención es más segura, destacó Neužil.
“La operación reduce los riesgos habituales de las operaciones de hoy, ya que elimina la intervención en la vena situada en la región clavicular, donde se puede dañar el pulmón, en el que puede penetrar aire o sangre”, dijo.
Además, el nuevo aparato reduce los riesgos a largo plazo, como es el de infección o el de fallo mecánico de los electrodos.Varios centros médicos europeos ahora pondrán a prueba el nuevo marcapasos. En caso de pasar las pruebas, el aparato obtendrá la certificación y será lanzado al mercado.
El primer marcapasos se estrenó a nivel mundial en 1958, en Checoslovaquia se implantó por primera vez cuatro años más tarde. Hoy día lo utilizan unos cuatro millones y medio de pacientes en todo el mundo, 80.000 de ellos son checos.