Un 15% de los checos se ha encontrado con sobornos en el sector público
Un 15% de los checos se encontró el año pasado con un soborno en su trato con el sector público, según el informe sobre corrupción en el mundo presentado por Transparencia Internacional. La cifra es menor que la media mundial, sin embargo crece en el país la percepción de los partidos políticos como la institución más corrupta.
El nivel de corrupción es sin embargo todavía mayor que el de países como Gran Bretaña, España, Uruguay, Japón o Australia, donde el porcentaje de personas que tuvieron esta experiencia está por debajo del 5%. Chequia se equipara así al nivel de corrupción de otros países ex comunistas, como Rumanía, Macedonia, Eslovaquia o Hungría, así como al de algunos países latinoamericanos como Chile o Argentina, todos entre el 10 y el 20%.
En el estudio han participado 114.000 encuestados de 108 países, una amplitud tal que obliga a tener en cuenta también los factores culturales a la hora de valorar los resultados, como comenta el director de Transparencia Internacional en la República Checa, Radim Bureš.
“Hay una zona gris en la que es difícil distinguir cuándo se trata de un regalo sin importancia o de un soborno. En mucho casos depende de la judicatura, que decide cuándo sí y cuándo no. Tenemos casos de despidos por una caja de bombones. En la República Checa se considera que un regalo de más de 50 euros es un soborno, así que unas flores por ejemplo no lo serían. Pero en Inglaterra sería impensable que los padres regalaran flores al profesor al final de curso, como sucede aquí, así que es un tema muy condicionado culturalmente”.En Chequia es costumbre hacer regalos a los médicos después de una consulta o un tratamiento, lo que puede verse como corrupción por ciudadanos de otro país pero que aquí se trata de una práctica cultural y por tanto no se refleja en la encuesta. Aún así, la mayor parte de los checos que dijeron haber tenido experiencia con sobornos, a la mayor parte le pasó en sector de la sanidad, con lo que sería en la práctica el sector más corrupto, seguido de cerca por los servicios de registro catastral o permisos de otra índole.
Sin embargo, la institución considerada más corrupta es otra, según explica Bureš.
“Para mí fue una información sorprendente que los partidos políticos fueran la institución percibida como más corrupta a nivel global, y de la misma manera en la República Checa. Aquí en comparación con los resultados de 2008 la percepción de los partidos políticos ha empeorado tremendamente. Del 50% de los checos que consideraban corruptos a los partidos políticos en 2008 se ha pasado al 73%, un porcentaje de gente mucho mayor”.Otro dato negativo es que la percepción de la corrupción también ha aumentado en Chequia: el 57% de los checos cree que su país es más corrupto que antes. Hablando de percepciones, un 50% de los encuestados en Chequia considera que el gobierno del país está manejado principalmente por intereses privados, un porcentaje similar al de otros países occidentales, mientras que el 72% piensa que las medidas que se están tomando para atajar la corrupción son ineficientes.