El Gobierno busca el consenso sobre el mecanismo de freno de la deuda
El desbloqueo del mecanismo de freno de la deuda es el nuevo objetivo del Gobierno checo en materia económica. Un sistema que permitiría dar la alarma cuando se alcancen altos niveles de deuda y que pondría en funcionamiento una serie de medidas correctivas para estabilizar la economía.
Pero para que el mecanismo de freno comience a funcionar necesita ser aprobado por dos tercios del Parlamento, es decir, el Gobierno de centro-izquierda necesitaría el voto positivo de 9 legisladores más. Algo que se antoja complicado, pues el resto del arco parlamentario no está muy por la labor de situar ese nivel de riesgo en el 55% del PIB.
En general, la deuda pública checa alcanza el 43% del PIB nacional, por lo que no está en niveles extremadamente altos en comparación con otros muchos países europeos. Como ejemplo, en 2013, la deuda pública de Grecia fue del 174% de su PIB, la de Bélgica fue del 104% y la de Francia se situó en el 92%.