Praga reducirá el abono de transporte anual un 25%
El Ayuntamiento de Praga acaba de aprobar un recorte del 25% en el precio de los abonos anuales del transporte público. Una medida con la que pretende incentivar el uso del metro, el tranvía o del autobús y convertir así a la capital en una ciudad menos contaminada.
Un cambio en la política de transporte de la ciudad que, según estiman desde el Consistorio, los dos primeros años supondrá un esfuerzo económico de más de nueve millones de euros, pero luego los ingresos se equipararán a los actuales. Unas cifras que no le cuadran a la oposición, que alega que ese dinero tendrá que salir de otras partidas presupuestarias.
Pero el plan del Ayuntamiento para reducir la contaminación no sólo pasa por reducir el precio del transporte público. El Consistorio pretende crear una zona de bajas emisiones que prohíba la circulación de los vehículos más antiguos por el centro de la ciudad, además de modernizar la flota de autobuses y tranvías para que contaminen mucho menos.