Las exportaciones salvan la producción de cerveza
La República Checa sigue teniendo el mayor consumo de cerveza per cápita en el mundo. Sin embargo, el mercado interno se ha estancado y sólo un aumento en las exportaciones impidió que las cervecerías checas registrasen una caída de la producción total en 2014, según las cifras que acaban de publicar los cerveceros checos y la Asociación de Malteado.
En 2014 seis grupos cerveceros del país, 29 cervecerías independientes y 280 microcervecerías produjeron 19,65 millones de hectolitros de “pivo”, un aumento del 2,3% respecto al año anterior. Un dato positivo en apariencia pero que aún está lejos de los que se registraban antes de la crisis. De hecho, en 2009, se produjo un récord de 19,88 millones de hectolitros. Pero al año siguiente comenzó la paulatina caída debido a la reducción del número de turistas y al aumento del IVA.
Respecto a las exportaciones, en 2013, se exportaron 3,39 millones de hectolitros, en 2014 esa cifra fue de hasta 3,65 millones de hectolitros. Un aumento que ha salvado a los cerveceros de una caída en su producción.
El consumo nacional ascendió a 16,92 millones de hectolitros del año pasado, un descenso muy ligero. Y es que el porcentaje de cerveza que se consume en los pubs alcanzó un mínimo histórico del 41%, mientras que en 2009 era del 51%. Algo que demuestra que los checos cada vez beben más en casa, que es más barato.Ante esta huida de los clientes de los pubs a sus casas, los cerveceros están incentivando nuevas propuestas en sus establecimientos. Por ejemplo, el líder del mercado, Plzeñský Prazdroj, está entrenando a propietarios y al personal para manejar y tirar su “pivo” mejor, mientras que la firma también apuesta por la fabricación de cervezas de edición limitada.