Los checos se aficionan a la sidra
Los checos están empezando a sentir un gran aprecio por la sidra. Cerca de dos millones de litros fueron vendidos el año pasado en la República Checa y los checos gastaron casi cinco millones de euros en esta bebida.
De acuerdo con Nielsen, un litro de sidra ahora se vende por unos dos euros y medio y las marcas más populares son Brithis Carling, Czech Kingswood y Danish Sommersby.
Las marcas de cerveza local han respondido a este ascenso de popularidad de la sidra expandiendo su oferta de esta bebida. Staropramen, conocida marca de cerveza checa, este año ha introducido dos nuevas sidras en el mercado: una de cereza y otra de lima y menta. De acuerdo con el informe, la sidra es la bebida alcohólica que más rápido está creciendo en ventas en la República Checa y se espera que su consumo en Europa crezca hasta un tercio entre 2013 y 2017.
De acuerdo con Monika Horákova, de Pilsen, hombres y mujeres consumen cantidades parecidas de sidra y es una bebida tomada principalmente por consumidores jóvenes. Los principales fabricantes de cerveza checos, Pilsen, Staropramen y Budvar, han empezado a producir sidra en los últimos años. Heineken, cuarto en el mercado, se unió esta primavera, cuando empezaron lanzaron la marca más popular de sidra, Strongbow. Hay un incremento en el número de pequeños productores de sidra como F.H Prager, Rossbach o Mad Apple Cider.
En países con una gran tradición cervecera, como Gran Bretaña, Australia o Escandinavia, las sidras normalmente ocupan entre un 10 o un 15% del mercado.
