Los bajos sueldos dificultan la entrada de nuevos profesores en el sistema educativo checo

Foto: Filip Jandourek, Radiodifusiónn Checa

Varios países europeos se enfrentan a una inminente falta de profesores, y a menos que tomen medidas pronto se encontrarán con un serio problema, de acuerdo con un informe publicado este año por la Comisión Europea. La República Checa se halla en la lista y de hecho se le ha recomendado reaccionar rápidamente para contratar nuevos docentes.

Foto: Filip Jandourek,  Radiodifusiónn Checa
Los bajos sueldos y la falta de respeto con la que empieza a encontrarse los profesores son las dos razones claves de por qué los checos recién licenciados evitan dedicarse a la docencia. Un maestro de escuela en la cima de su carrera gana mensualmente después de impuestos unos 712 euros, mientras que la media de un trabajador con estudios universitarios es de 1.145 euros. El salario promedio en la República Checa es de 790 euros limpios. Entre los miembros de la OCDE solo tienen una remuneración peor en Islandia, Hungría y Eslovaquia.

Según informa el diario Hospodářské Noviny, esta realidad lleva a que muchos graduados que podrían ver su futuro dando clase en escuelas básicas y secundarias se dediquen a otra rama. Al mismo tiempo son muchos los profesores que dejan las aulas en cuanto les surge un empleo mejor pagado.

Los directores de los centros educativos se quejan de que tienen grandes dificultades para encontrar profesores de matemáticas, física o química cualificados. Por ejemplo el número de graduados en pedagogía con especialización en física fue el año pasado de solo 51 en todo el país.

Esta falta de perspectiva conlleva dos fenómenos. El primero es un envejecimiento progresivo de la profesión, el segundo la feminización, ya que debido a la gran diferencia de sueldos entre hombres y mujeres en el sector privado, es más probable que una mujer acepte el salario de maestra que un hombre. Y esto en una profesión tradicionalmente dominada por el género femenino. En la escuela primaria checa el 95% de los docentes son mujeres.

El problema es compartido por otros países europeos. Países como Gran Bretaña, Suecia y Letonia han comenzado campañas para fomentar la profesión que presentan el ser maestro como algo "creativo, inspirador y con sentido", y ofrecen becas para aquellos dispuestos a especializarse en asignaturas como físicas y matemáticas, donde falta más personal.

Según el mencionado informe de la Comisión Europea, los países de Europa Central y del Este están subestimando el problema y de momento han fallado a la hora de introducir medidas para corregir esta tendencia negativa. En la República Checa, a pesar de las continuas promesas de reforma, los profesores siguen siendo los licenciados universitarios peor pagados.