El desempleo baja en Chequia y se mantiene en un 5,3%
El desempleo de la República Checa baja en agosto para situarse de nuevo en un 5,3%. El pasado mes había en el país poco más de 388.000 personas buscando trabajo, la cifra más baja desde agosto de 2008. En una cifra récord se sitúa también la cantidad de puestos de trabajo disponibles.
El desempleo es así en Chequia el segundo más bajo de la Unión Europea después de Malta. El fenómeno trae consigo consecuencias positivas, básicamente en forma de salarios más altos y mayores ingresos por parte del Estado, ya que se consume más, se cotiza más y no se pagan tantas prestaciones por desempleo. Al mismo tiempo, sin embargo, las empresas no consiguen crecer en todo su potencial por falta de mano de obra.
Un ejemplo es la compañía de piezas de carrocería para el sector automovilístico Motorpal, que no tiene trabajadores suficientes para cubrir todos los pedidos. Según su director general, Radim Valas, ha sido necesario introducir incentivos.
“En cuanto uno de nuestros empleados recomienda el puesto a alguien, y este al final entra en nuestra compañía, el trabajador es recompensado con un bonus de 400 euros”.
En concreto la República Checa necesita ante todo obreros para líneas de montaje, auxiliares técnicos, herreros, mecánicos y conductores de camión y autobús. Es por ello por lo que el Gobierno está tratando de facilitar la llegada de mano de obra extranjera, especialmente de Ucrania. Radim Valas aprueba totalmente la medida.“Hemos pedido en la Oficina de Empleo de Jihlava el permiso para emplear trabajadores extranjeros, precisamente para las profesiones especializadas como labradores de metal y otras parecidas”.
Aunque el salario medio ha crecido en Chequia en el último trimestre un 4% y está ahora en torno a los 1.010 euros brutos, sigue siendo mucho menor que el de la Austria o Alemania. Por ejemplo en 2015 el sueldo medio fue en Alemania de 3.920 euros. Es por ello por lo que la ministra de Trabajo, Michaela Marksová, opina que solución para hacer más interesantes las profesiones técnicas pasa necesariamente por mejorar las remuneraciones.
“En estos momentos los empleadores deberían reflexionar sobre cuánto dinero están ofreciendo a la gente. Nuestros trabajadores lo hacen igual de bien como la gente con el mismo empleo en Austria o Alemania, y las diferencias salariales son enormes”.Para el opositor Partido Cívico Democrático el problema radica en un sistema de prestaciones por desempleo demasiado benigno, que a su parecer permite vivir sin trabajar y es tan blando que no obliga a la gente a recualificarse.
Como en otros países, el desempleo tiene en Chequia carácter regional. Las cifras más bajas se dan en la capital (3,9%) y en la región de Pilsen (3,8%), mientras que las más altas se registran en la región de Ústí (8,2%) y Moravia-Silesia (7,7%), ambas caracterizadas por el fin de la industria pesada.
Precisamente otro problema que detectan los expertos respecto al desempleo checo es la escasa movilidad de los desempleados, que no están dispuestos a trasladarse para buscar empleo, a veces por los costes que ello supondría. Un programa del Ministerio de Trabajo debería empezar a subvencionar los desplazamientos en el caso de las personas que encuentren trabajo lejos de casa.