La ópera checa Polo Sur conquista Múnich
‘Polo Sur’, la última ópera del compositor checo Miroslav Srnka, se ha convertido en la estrella del repertorio de la Ópera Estatal Bávara de Múnich. La obra, que relata la carrera entre Robert Scott y Roald Amundsen por la conquista de la Antártida, destaca por su gran ambición musical.
La obra combina una puesta en escena atrevida y vanguardista con una gran experimentación musical y una temática fuertemente épica: la conquista del Polo Sur, una carrera por la Antártida en la que compitieron los equipos del británico Robert Scott y el noruego Roald Amundsen.
El tema fue acordado por Srnka y Holloway en 2011, y durante cuatro años ambos trabajaron en la ópera de forma separada, uno en Praga, el otro en Melbourne, pero en contacto constante por e-mail y Skype. Las últimas notas de la partitura fueron compuestas por Srnka en otoño de 2015. El estreno se realizó en Múnich en febrero de 2016 cosechando un tremendo éxito.
Historia de éxito y muerte
La ópera comienza con el telegrama que Amundsen mandó a Scott informándole de su intención de alcanzar el Polo Sur antes que él, y que dio inicio a la competición. La pieza narra la historia de ambos equipos a veces en paralelo, a veces consecutivamente, en una suerte de doble ópera. Mientras que al principio la acción de los dos grupos se entrelaza cada vez más, pasada la llegada al Polo Sur su interacción escénica y musical se va separando hacia el final de la obra.
De aquel viaje, que tuvo lugar entre 1910 y 1912, solo nos quedan los testimonios de los diarios dejados por sus protagonistas. La ópera explora los espacios vacíos entre esas líneas, completando y redondeando la historia oficial.
Mientras que el año pasado de dar vida a Scott se encargó Rolando Villazón, en esta nueva temporada el papel lo interpretará John Daszak. Por su parte el estadounidense Thomas Hampson se pondrá en la piel de Roald Amundsen.
Experimentación musical y escénica
Con una puesta en escena original y arriesgada, los ponis y perros son por ejemplo interpretados por actores humanos, ‘Polo Sur’ destaca no obstante ante todo por su música. Srnka ideó una ópera basada en sobreimposiciones, con solapamientos de todo tipo en diferentes maneras. La originalidad de la pieza llega hasta el punto de contar con música grabada real, cuando en los equipos suenan los gramófonos que se han traído para pasar el tiempo.
De acuerdo con Srnka, situar la acción en la Antártida le dio más libertad creativa.
“Es un lugar que era, y sigue siendo, real, pero que parece surreal para cualquiera que venga de la civilización. Las características del clima y el paisaje, sus colores, no parecen reales. Eso es por lo que este ambiente no supone una barrera para una interpretación surrealista”.
Como ejemplo de experimentación, los ponis y perros de las expediciones cuentan con sus propias voces, usando seis cuernos y seis clarinetes. La percusión, que cuenta con un papel clave, está basada en instrumentos poco usuales, como cencerros, marimbas, un glockenspiel y un vibráfono. Se utilizan también utensilios de cocina a modo de instrumentos, como por ejemplo las cuerdas de un cortador de huevos.
La ópera ‘Polo Sur’ cuenta con su propio blog en Internet, que se va actualizando con las novedades en la producción y difusión de la obra y donde también se encontrará con detalle descrito el contexto histórico de la célebre competición entre Scott y Amundsen.
