Más seguridad en las carreteras con el proyecto ‘Speed marathon’
La Policía de Tránsito checa se adhirió al proyecto europeo ‘Speed marathon’, que persigue una mayor seguridad vial. Policías uniformados controlan en las carreteras cómo los conductores respetan la velocidad máxima permitida.
Según recalcó Eva Kropáčová, portavoz de la Presidencia de la Policía checa, se trata de una actividad de carácter preventivo.
”El objetivo del operativo es convencer a los conductores que respeten los límites de velocidad establecidos y recudir así las situaciones de riesgo en las carreteras. Consideramos importante inculcarles que al manejar de forma temeraria o arriesgada pueden ocasionar colisiones y accidentes de tráfico con consecuencias trágicas”.
Los sitios, en los que se controla la velocidad fueron escogidos por la Policía en base a propuestas presentadas por los ciudadanos por medio de una encuesta. Éstos escogieron más de 10.700 tramos de carreteras que consideran peligrosos y hasta de gran riesgo para la seguridad vial. En la encuesta tomaron parte unas 70.000 personas. Del total de las propuestas la Policía determinó posteriormente más de mil sitios que incluyó en el operativo.
Como el más peligroso y con mayor número de accidentes de tráfico, los ciudadanos calificaron un tramo en la carretera que une las ciudades de Ústí nad Orlicí y Česká Třebová, en Bohemia nororiental.Durante el año pasado por ejemplo, 545 personas fallecieron en Chequia en accidentes de tráfico, 2.580 sufrieron heridas de gravedad, y otras 24.000 heridas leves. La causa principal de estos accidentes fue precisamente la superación de los límites de velocidad permitidos, y el no adaptar la velocidad al estado técnico o ambiental de la carretera. Otros motivos fueron el no concentrarse el conductor plenamente al manejar y el circular por la carretera en dirección contraria.
La campaña ‘Speed marathon’ es organizada por la sociedad Tispol, la Red Europea de la Policía de Tránsito. Sus personeros insisten en que el objetivo no es multar a los conductores, sino convencerlos que manejen respetando las normas y señales de tráfico, a fin de proteger su propia vida y la de las demás personas en las carreteras.