El 'febrero seco', un desafío contra el alcohol
El 'febrero seco' es un intento de convencer a la gente para que beban menos alcohol. Transcurre desde el año 2013 bajo el patrocinio de la Liga de los Hombres Abiertos y desde entonces se convirtió en una campaña por una vida más saludable.
Según sostiene la Liga de los Hombres Abiertos, el consumo excesivo de bebidas alcohólicas es uno de los mayores problemas para la salud de los hombres de hoy en día. Es más, los hombres checos son de los que más alcohol consumen en todo el mundo. Un checo regular bebe tres veces más de lo que es el promedio mundial.
Josef Petr, sociólogo de la Liga de los Hombres Abiertos, nos cuenta, cómo surgió la idea.
''Empezamos en Facebook, donde tenemos un grupo que reúne a los miembros de la Liga. El primer año participaron más o menos 120 personas. Los años siguientes, la campaña llamó la atención de más personas. Sin embargo, la comunicación transcurría sólo online porque no había dinero para pagar publicidad. A pesar de ello, ahora contamos con cientos o más bien miles de personas que participan''.
De acuerdo con los datos de la Organización Mundial de la Salud, el consumo de alcohol en Chequia es de 18.6 litros per cápita por año y las estadísticas del Gobierno indican que hasta el 23% de los hombres checos son adictos a consumir alcohol. Josef Petr explica que lo que en otros países no es un problema, para algunos checos puede resultar un gran desafío.
''A uno se le puede ocurrir que abstenerse de beber alcohol durante un mes es fácil. Sin embargo, en el caso de muchos checos puede ser un desafío enorme y para algunos hasta una verdadera prueba de adicción. El resto de la población lo puede considerar una breve desintoxicación durante la cual tienen la oportunidad de conocer mejor el nivel de su dependencia y la relación con el alcohol''.
''Hicimos una encuesta entre los participantes y averiguamos que la mayoría dice que pasado el febrero, no vuelven a beber tanto. Se trata de un 80% para los cuales, después de abstenerse de alcohol durante todo el mes, la necesidad de beber tanto desaparece. Es como si la sobriedad fuera también algo adictiva''.
Muchos de los participantes también sostienen que se les mejoró la calidad de sueño o que sienten tener más energía. En general, que se sienten más relajados.
