Comienza el “Febrero seco” para llevar una vida más sana
La campaña Febrero seco, que comienza en Chequia este jueves, pretende reducir el consumo de alcohol y motivar a llevar un modo de vida más sano.
Chequia sigue siendo uno de los países del mundo con mayor consumo de alcohol. De acuerdo con el Centro Nacional de Monitoreo de Drogas y Adicciones, más de un millón de personas en el país se encuentra al borde de la adicción al alcohol. Figura entre ellos un gran número de adolescentes.
Advertir sobre el peligro del consumo diario o muy frecuente de bebidas alcohólicas es lo que pretende la campaña Febrero seco, que comienza este jueves con el propósito de concienciar para llevar un modo de vida más sano y practicar más deporte.
Estos objetivos son respaldados por el Ministerio de Salud, según confirmó a la Radio Checa el ministro de la cartera, Vlastimil Válek.
“La idea de esta campaña no radica en que once meses al año uno pueda tomar bebidas alcohólicas en grandes cantidades y luego un mes dejar de consumirlas. Lo que se quiere es que la gente se dé cuenta de que el alcohol es una sustancia peligrosa y adictiva, que el alcohol destruye el organismo”.
Cada vez más personas se suman a la iniciativa desde que comenzó su actividad en 2013.
Este año los organizadores esperan haber cumplido la tarea que se habían trazado de contar con más de un millón de participantes registrados, mientras que el año pasado fueron 900.000. La campaña se centró esta vez en la colaboración con las empresas del país, según dijo a la Radio Checa Martina Bulánková, una de sus organizadoras.
“La campaña Febrero seco tiene este año el subtítulo ‘Seamos ejemplo’. Nuestro objetivo fue que a través de empresas y otras instituciones se motive a los ciudadanos a inscribirse en el “febrero seco”. A las empresas les ofrecimos a cambio, por ejemplo, unos “calendarios secos” con muestras de té, recetas de comidas sanas y viajes gratuitos en bicicletas compartidas. Al final de la campaña les daremos también la información sobre el número de participantes que motivaron a inscribirse”.
De acuerdo con Petr Freimann, de la asociación cívica Febrero Seco, la Organización Mundial de la Salud sitúa a Chequia entre los tres mayores consumidores de bebidas alcohólicas a nivel mundial. En el caso de Chequia, anualmente se declaran unos 14 litros de alcohol puro por persona, sin contar con lo que consumen los turistas.
Alarmantes son los resultados de un estudio de Febrero Seco denominado ‘No le des de beber alcohol a los niños’. Estos revelaron que aproximadamente una quinta parte de los padres en Chequia ofrecen a sus hijos, que a veces tienen entre tres y seis años de edad, cerveza sin alcohol o diversos tipos de cerveza mezclada con algún refresco. Pero estas bebidas también contienen alcohol aunque en menores cantidades. Según el Centro Nacional de Monitoreo de Drogas y Adicciones, unos 115.000 adolescentes en la República Checa tienen problemas con el alcohol.
Pero los checos siguen siendo muy tolerantes frente a las bebidas con alcohol. Uno de cada cuatro menores checos probó por primera vez estas bebidas en compañía de sus padres. Y el 15% de los padres checos considera que darle una pequeña cantidad de alcohol a su hijo menor de edad no es dañino, de acuerdo con datos reunidos por Febrero Seco.
