Chequia no sabe qué hacer con los residuos plásticos
El plástico se sigue acumulando en la República Checa y por ahora las perspectivas para el futuro no son buenas. Es por ello que el Ministerio de Medio Ambiente quiere que las empresas limiten su producción.
Cada año en la República Checa se utilizan grandes cantidades de platos, vasos para el café y botellas, todos ellos hechos de plástico. La cifra de residuos anual en el país llega a superar las 20 000 toneladas. Preocupados ante el avance de estas cifras, el Ministerio de Medio Ambiente pide a las empresas que limiten la producción de plástico, especialmente cuando se trata de plásticos de un solo uso. Sobre el tema habló para la Radiodifusión Checa el ministro de dicha cartera, Richard Brabec.
“No es una lucha contra el plástico como tal, pero en este momento estamos subordinando nuestra vida a los plásticos de un solo uso. Entonces nuestra intención es acabar con el uso excesivo de este tipo de plásticos”.
Aunque muchas empresas ya han tomado medidas y ofrecen alternativas a sus consumidores, todavía queda mucho trabajo por delante.Uno de los motivos principales de la acumulación de plásticos se encuentra en el abuso que hacemos de los envases de plástico, como señala el director ejecutivo de la Asociación de Industria de Materias Secundarias, Petr Šulc.
“No se han hecho cambios fundamentales y los problemas siguen existiendo. En relación con esta crisis se supone que gran parte de ese plástico será almacenada en vertederos. El 40% de estos plásticos primarios son envoltorios de productos, entonces está claro el camino a seguir, hay que cambiar la composición de estos envases”.
Sin duda, la reducción de envases de plástico sería fundamental para mejorar estos problemas. Sin embargo, algo que no está nada claro es adónde llevar el plástico que producimos ahora que China no es una opción. Para Petr Šulc, deberíamos enfocarnos en construir centros de procesado de plástico más grandes en Europa.“Sería posible buscar el destino del plástico dentro de la Unión Europea, donde hace falta crear más lugares para procesarlo. Según la estrategia de la UE, sería necesario multiplicar por cuatro la capacidad de estos lugares“.
Mientras que en el pasado las empresas podían ganar dinero vendiendo sus plásticos a China, la situación hoy en día es totalmente opuesta, ya que en muchos casos es necesario gastar dinero para deshacerse de dichos residuos.