Científicos checos investigarán los efectos y propiedades de la ayahuasca
Un grupo de científicos checos emprenderá un viaje para estudiar a fondo los efectos y propiedades de la bebida alucinógena sudamericana conocida como ayahuasca.
El neurólogo e investigador del Instituto Nacional de Salud Mental, Tomáš Páleníček, quiere analizar los efectos neuropsicológicos y neurobiológicos de la ayahuasca.
Esto quiere decir que prestará especial atención a los efectos agudos de la ancestral bebida de los indígenas de Sudamérica en el cerebro humano y la influencia a largo plazo de la misma en el estado de ánimo y en las relaciones interpersonales.En declaraciones a Radio Praga, el experto indicó que la expedición científica había surgido como un proyecto checo, pero que ahora se ha convertido en un programa internacional.
“Al principio se trató de un proyecto checo. Recibimos apoyo de la fundación Neuron, pero con el tiempo se transformó en un proyecto internacional. Nos acompaña Eduardo Schoenberg, de Brasil, un alemán, dos antropólogas de Italia y parcialmente nos ayuda Jeremy Narby, uno de los primeros en popularizar la ayahuasca”.
La ayahuasca surge de la mezcla de dos plantas que crecen en la región amazónica. Una es la liana, o enredadera conocida como ayahuasca y un arbusto llamado chacruna que es alucinógeno.Los chamanes realizan una ceremonia o ritual con el fin de ayudar a las personas, que así lo quieran, a recuperar su equilibrio físico y espiritual. Entran en trance de visiones psicodélicas y sufren vómitos y diarreas. Los indígenas sostienen que la ayahuasca limpia la mente y el cuerpo para facilitar una nueva percepción del individuo y del mundo que lo rodea.
La bebida ayahuasca ha llamado la atención de los científicos desde hace mucho tiempo, subrayó Paleníček.
“El primero en estudiar de manera científica la ayahuasca fue Jordi Riba, en Barcelona. Llevó a cabo estudios fenomenológicos con voluntarios sanos, y realizó mediciones de la actividad eléctrica cerebral”.
El equipo dirigido por el neurólogo checo Tomáš Paleníček, planea estudios con una serie de voluntarios, incluidas personas oriundas de la región amazónica.
“Queremos trabajar con un mínimo de 18 voluntarios, pero pueden ser más. Esperamos que se trate de hombres y mujeres, porque ya no vale aquello de que la ceremonia es solo para hombres”.Paleníček dijo que parte del experimento será hacer creer a los voluntarios, en determinado momento, que les fue suministrada ayahuasca sin ser cierto, y estudiar su comportamiento.
Las investigaciones de los científicos checos y del equipo internacional, son parte de una serie de estudios que llevan a cabo diferentes países, acotó Paleníček.
“Las últimas investigaciones se realizaron en Brasil. Cabe destacar que se trató de voluntarios con algunos problemas de salud. Personas que sufren estados muy fuertes de depresión. Quedó demostrado que en algunos casos, y bajo determinadas circunstancias, la ayahuasca puede funcionar como antidepresivo”.La bebida ancestral de los indígenas del Amazonas sigue guardando muchos secretos. Algunos investigadores indican que el ritual de la ayahuasca no es para todas las personas, porque al igual que un fármaco puede tener efectos secundarios. Por el momento se han registrado casos en los que personas con problemas psicológicos o psiquiátricos significativos sufren un empeoramiento de la enfermedad.
Los científicos checos tratarán de descifrar alguno de los tantos enigmas que encierra la ayahuasca, una mezcla de tradición, droga y medicina.