Trágico fin de vacaciones en las carreteras checas
Con un balance trágico acabó el último fin de semana de estas vacaciones en la República Checa. Durante el sábado y domingo perdieron la vida en las carreteras checas 17 personas.
No fue el único accidente de circulación del que informó la Policía checa este fin de semana. El más trágico se produjo en la noche del viernes al sábado en la carretera entre las ciudades de Litomysl y Moravská Trebová, en Bohemia Oriental. Se cobró las vidas de seis ocupantes del Renault, cuatro adultos y dos niñas de edad de seis y ocho años, que viajaban de Bohemia del Norte a visitar a su familia en Eslovaquia.
El único que sobrevivió el choque fue un bebé de ocho meses que dormía en la parte trasera del automóvil. Le salvaron la vida las mantas en las que estaba envuelto. Sus padres y familiares, al contrario, no tenían abrochado el cinturón de seguridad. El conductor de la camioneta, que causó el accidente, sufrió leves heridas. La tragedia ocurrió en el mismo lugar en que hace cuatro años falleció el jugador de la selección checa de baloncesto, Vladan Vahala.Siete personas más que el año pasado murieron en las carreteras checas el último fin de semana de vacaciones.
El ministro del Interior, Frantisek Bublan, adjudica el elevado número de muertos en accidentes de tráfico a la indisciplina y muchas veces a la falta de respeto de los conductores checos. Las causas más frecuentes de los trágicos accidentes son el exceso de velocidad, el alcohol y el cansancio, afirman los expertos.
Como prevención, la Policía planea organizar cada año veinte amplias operaciones de control de tráfico en todo el territorio del país. Los tramos más peligrosos serán vigilados cada día por patrullas de tráfico.