Las bacterias del ántrax se encuentran bajo estricto control
Una lista de las enfermedades que podrían afectar a la población en caso de un ataque terrorista con armas biológicas contra la República Checa, es elaborada actualmente por los ministerios de la Salud y del Interior checos.
A pesar de coincidir los círculos militares y políticos checos en la apreciación de que el peligro de un ataque terrorista contra la República Checa es mínimo y menos aún con utilización de armas biológicas, el país se prepara para semejante eventualidad. En vigor siguen las medidas de seguridad extraordinarias tomadas poco después del ataque terrorista contra Estados Unidos, y actualmente se dedica también atención al control de las sustancias biológicas letales. Junto con ello se procedió a la instrucción del personal sanitario para el caso de un eventual ataque terrorista con armas biológicas y los ministerios de la Salud y del Interior elaboran una lista de las enfermedades que podrían presentarse en el país a consecuencia de un ataque con armas biológicas. Además, en el país se procedió a un riguroso control y a la protección de las fuentes de agua potable.
Jan Petrás, jefe de los Servicios Sanitarios de las Fuerzas Armadas checas, sostuvo que aunque la eventualidad de que los terroristas recurran a las armas biológicas sea mínima, ello no se puede descartar por completo. Petrás explicó que las armas biológicas son sumamente peligrosas e insidiosas, ya que surten efecto sólo después de cierto tiempo. A la vez, matizó Petrás, su utilización no es tan fácil porque se requiere una cierta concentración de las bacterias, una temperatura estable y otros factores. Es por ello que el jefe de los Servicios Sanitarios de las Fuerzas Armadas checas duda de que los terroristas recurran por ejemplo al ántrax o a los bacilos botulínicos.
"Independientemente de que el peligro de un ataque con armas biológicas sea mínimo, la República Checa introdujo últimamente un control aún más rígido de las sustancias biológicas letales utilizadas para fines de investigación en laboratorios del país", afirmó Josef Duben, portavoz de la Administración Veterinaria Estatal. Aseguró que las sustancias biológicas en cuestión están estrictamente registradas y se encuentran depositadas bajo varios dispositivos de seguridad.