Netanyahu llega a Praga para agradecer el voto contra Palestina en la ONU

Benjamín Netanyahu, foto: ČTK

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, pasó fugazmente por Praga este miércoles para agradecer en persona al Gobierno checo el “valiente” apoyo recibido por Praga, al votar en contra del reconocimiento de Palestina como Estado observador en la ONU. La postura del Gobierno checo no es sin embargo compartida por la oposición. Además, fue organizada una concentración de protesta contra la visita de Netanyahu.

Benjamín Netanyahu,  foto: ČTK
Benjamín Netanyahu volvió a visitar Praga este miércoles. Se trata de la segunda visita del primer ministro israelí en lo que va de año, y con ella, todas las medidas de seguridad especiales que acompañan a uno de los hombres más protegidos del planeta.

La rápida visita es para agradecer a la República Checa el haber sido uno de los únicos nueve países que votaron en contra de la consideración de Palestina como Estado observador en la Organización de las Naciones Unidas. El nuevo estatus sin embargo lo lograron los palestinos por una gran mayoría de 138 votos a favor y 41 abstenciones.

La República Checa fue el único país europeo que se unió al ‘no’ que encabezaron Estados Unidos, Israel y Canadá, argumentando que la iniciativa unilateral llevada a cabo por Palestina perjudica a la paz en la región.

Foto: Archivo de ČRo7
Jiří Ellinger, director del departamento de Oriente Próximo y norte de África del Ministerio de Relaciones Exteriores, defiende la consistencia de la postura checa.

“Las instrucciones finales las aprobó y firmó el ministro el mismo día de la votación. Pero nuestra posición, de la que informamos a nuestros compañeros de otros países europeos, siempre ha estado clara desde el principio”.

El voto de Praga parece no representar una postura tan unánime en la sociedad checa. La oposición socialdemócrata y comunista criticó tal decisión y este miércoles la Iniciativa por una Paz Justa en Oriente Próximo organizó una manifestación contra la visita de Netanyahu en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga.

El analista Šádí Shanaáh, de la Universidad Anglo-Americana de Praga, opina que la diplomacia checa actúa subordinada a los intereses de Estados Unidos e Israel.

Šádí Shanaáh,  foto: Archivo de ČRo
“La posición checa es de alguna forma copiar la política exterior de Estados Unidos e Israel sin llevar a cabo casi crítica alguna. Hasta cierto punto, los intereses checos están subordinados a esta postura. Si miramos los materiales del Ministerio de Relaciones Exteriores, vemos que entran en contradicción. Por un lado se dice que rechazan decisiones unilaterales, pero por otro no se critican importantes decisiones unilaterales que lleva a cabo Israel, que ni siquiera son mencionadas”.

Šádí Shanaáh, califica incluso de “vergonzosa” la postura de Chequia “no solo por el voto dado en la ONU, sino también por cómo lo justificaron algunos políticos checos”, y se refiere por ejemplo al senador y candidato presidencial Přemysl Sobotka, cuando escribió que el resto del mundo “había perdido la razón”.

Netanyahu, tras abandonar Praga, se dirigió a Berlín, donde la diplomacia alemana sí le pedirá explicaciones por los planes de nuevos asentamientos en el territorio palestino de Cisjordania con los que Jerusalén ha respondido a la bienvenida que la ONU ha dado a Ramala. Una noticia que ha provocado que países como Reino Unido, Francia o España llamaran a consulta a los respectivos embajadores israelíes.