Los ríos desbordados en Chequia comienzan a bajar de a poco, los daños son millonarios

Děčín, foto: ČTK

Las inundaciones siguen afectando a la República Checa. El mayor grado de peligro por inundaciones continúa en 17 lugares del país. Mientras que en Bohemia del Sur, Central y Occidental las aguas de los ríos y estanques desbordados comienzan a bajar, en Bohemia Noroccidental la situación sigue siendo crítica, especialmente en las ciudades de Ústí nad Labem y Děčín.

Terezín,  foto: ČTK
El río Elba alcanzó su punto crítico en Ústí nad Labem y Děčín la madrugada de este jueves, según información de las Alcaldías de esas ciudades. El nivel del agua llegó a 10,7 metros de altura, lo que es menos que durante las devastadoras inundaciones del año 2002. Aún así, las riadas afectaron seriamente unas 50 poblaciones en la región de Ústí y más de 11.000 personas tuvieron que ser evacuadas. Unos 7.500 hogares en esa zona se quedaron sin luz, calor y electricidad.

Litoměřice,  foto: ČTK
Mientras tanto, en las ciudades de Litoměřice, Lovosice, Roudnice nad Labem y Terezín, que fueron inundadas en parte y las aguas comenzaron a bajar, se inician los trabajos de limpieza. Según destaca Zdeñka Jágrová de la Central de Higiene de Praga, lo más importante es respetar las normas de higiene.

Děčín,  foto: ČTK
”En estos casos existe un peligro latente de contraer una enfermedad infecciosa en caso de que las personas no se protegieran debidamente. Recomendamos usar guantes protectores, botas de goma y desinfectantes. Actualmente no registramos una mayor proliferación de ese tipo de enfermedades, pero siempre es mejor tomar la máxima precaución”.

El Estado liberó las reservas de vacunas contra el tétano, la ictericia tipo A y B y otras enfermedades infecciosas.

Las inundaciones en Chequia costaron ocho vidas humanas y afectaron a 700 poblaciones

Foto: ČTK
Las inundaciones se cobraron en Chequia la vida de ocho personas hasta el presente y los daños causados por las riadas alcanzarán centenares de millones de euros, según se estima. El desastre natural afectó 700 poblaciones en el país y 19.000 personas en total tuvieron que ser evacuadas. Alrededor de 130 tramos de carreteras continúan cerrados por estar bajo el agua. Unos 23.000 bomberos profesionales y voluntarios siguen trabajando en diferentes lugares, ayudando también con los trabajos de limpieza. Desde el comienzo de las inundaciones el domingo pasado, los bomberos intervinieron en más de 5.100 ocasiones.

La vida en Praga vuelve a la normalidad

Foto: ČTK
La vida en Praga vuelve paulatinamente a la normalidad después de que las aguas del Moldava comenzaran a bajar este miércoles. Las barreras anti inundaciones protegieron de las riadas el casco histórico de la ciudad, por lo que las instituciones públicas, teatros y museos situados en esa zona volvieron a abrir, al igual que el Zoológico capitalino.

Este jueves fue restablecido también el funcionamiento del metro de Praga, aunque algunas estaciones permanecen cerradas todavía, especialmente en el barrio de Karlín y en Holešovice, según sostiene Milan Křístek, director de la Empresa de Transportes de Praga.

Foto: ČTK
”En vista especialmente de la situación en la estación Nádraží Holešovice, a donde penetra el agua desbordada del Moldava y hay peligro de descargas de electricidad, esta parada de metro permanecerá cerrada mientras sea necesario. Nuestros expertos siguen la situación y esperan que el agua del Moldava baje a un nivel seguro. Cuando ello ocurra, será posible restablecer el funcionamiento del metro en Praga por completo”.

Los daños ocasionados por las riadas llegan a centenares de miles de euros

Český Krumlov,  foto: ČTK
Las aseguradoras calculan que los daños ocasionados por las riadas en Chequia serán de cientos de millones de euros. Tan sólo en Praga ascienden a decenas de millones. El Gobierno liberó por el momento unos 210 millones de euros que serán repartidos por el país para superar el desastre causado por las inundaciones.

Český Krumlov,  foto: ČTK
En Bohemia del Sur y en Bohemia Occidental las cosas se normalizan también. Los ciudadanos necesitarán algún tiempo para recuperarse del impacto sufrido por las inundaciones y para paliar los daños. Sin embargo, muchos temen que algo semejante o peor todavía pueda producirse en un futuro próximo.