Los monarquistas checos exhortan a restaurar el Reino de Bohemia
Al son de una banda de instrumentos de viento marchó este lunes por Praga una comitiva de partidarios de la monarquía. Llevaban banderas con el retrato del penúltimo emperador Austro-Húngaro Francisco José I. Los monarquistas checos gritaban "¡Qué viva el rey!" y "¡No elijan a payasos, elijan un rey!".
El próximo quince de enero se celebrará la primera ronda de la elección del presidente de la República. Los partidarios de la monarquía desearían ver a la cabeza del Estado a una persona que hubiera sido educada para desempeñar este cargo desde su juventud. ¿Y quién debería ser? Un representante de una de las dinastías reinantes europeas, por ejemplo, el príncipe Carlos de Gales, manifestó uno de los organizadores del evento, el escritor Petr Placák.
"Pienso que Carlos nunca subirá al trono británico, ya que su madre, la reina Isabel, no lo considerará adecuado debido a sus problemas familiares. El futuro rey será probablemente su hijo, así que el príncipe de Gales quedaría disponible. Además, mantiene una relación cordial hacia las tierras checas, y es una persona educada, que se interesa por la cultura y la naturaleza".
El rey haría encarcelar y puede que incluso decapitar a todos los bolcheviques del país, expresó medio en broma uno de los participantes de la manifestación pro monarquía. Sustituir a la actual República por otra alternativa, sería una solución necesaria, opinó otro de los monarquistas checos presentes. "La lista presentada de candidatos a la presidencia de la República es tan pobre, que sería mejor restaurar la monarquía", dijo.La monarquía constitucional es el mejor régimen estatal y su restauración civilizaría la vida pública, afirman los monarquistas checos, quienes después de reunirse ante la estatua ecuestre del patrono checo San Venceslao en el centro capitalino, se dirigieron a la sede presidencial, el Castillo de Praga, para terminar su marcha simbólicamente delante del monumento del que fuera el primer mandatario checoslovaco Tomas Garrigue Masaryk.