Leos Janácek III - "La ópera refleja el carácter de la nación"
"En la ópera se reconoce el verdadero carácter de una nación", decía Leos Janácek. El mismo escribió nueve de ellas. Con la tercera, Jenufa, se le abrieron, por fin, las salas y teatros fuera de Brno, ciudad en que vivía, tanto en el país como más allá de las fronteras. En Radio Praga continuamos la miniserie con motivo del Año de la música checa, dedicada a uno de los mayores compositores checos, Leos Janácek.
Durante años, Leos Janácek fue un compositor cuya obra era conocida sólo por el público de la ciudad de Brno. "Sárka", la primera ópera que compuso, inspirado en un episodio de amor de la leyenda checa sobre la rebelión de las mujeres, fue estrenada muchos años después de su composición. La segunda, "El principio de una novela", basada en un cuento de Gabriela Preissová, la escenificó el mismo compositor en 1894, y fue por primera y última vez que Janácek se puso ante la orquesta para dirigir una ópera.
Su tercera ópera, Jenufa, según el libreto de Gabriela Preissová, la acababa en uno de los momentos más trágicos de su vida, al morir su joven hija Olga. Varios años antes había perdido a su hijo varón único, Vladimír.
Después del estreno de "Jenufa" en Brno, el 21 de enero de 1904, Janácek tuvo que esperar 12 años hasta que la ópera se presentara en el escenario del Teatro Nacional de Praga. Animado por el éxito, Janácek, a los 62 años de edad, se sumerge con entusiasmo en la composición.
Surgen "El Destino", la ópera más personal e íntima de Leos Janácek, que fue escenificada por primera vez en 1958, y "Excursiones del señor Broucek", en que se burla del carácter provincial. Siguen las óperas "Katya Kabanova", a cuya protagonista el amor y la sociedad empujan hasta el suicidio, "La zorra astuta", "Caso Makropulos", y como última "De la casa muerta", cuyo estreno en 1930 el compositor ya no llegó a ver.