Las personas de la tercera edad son más vulnerables a las noticias falsas
Las personas mayores se han convertido en el blanco de los servidores que difunden noticias falsas en la República Checa. La fundación Lepší Senior imparte cursillos entre las personas de la tercera edad sobre los peligros de las cadenas de correos electrónicos.
La fundación checa Lepší Senior ha puesto en marcha un programa de talleres para orientar a las personas mayores para que consigan identificar la desinformación.
El director del programa, Zdeněk Svoboda, dijo a la Televisión Checa que a la hora de hablar del tema resulta indispensable utilizar expresiones cercanas y comprensibles para este sector de la sociedad.
“El pensamiento crítico es un término conocido por la juventud, pero las personas mayores lo relacionan con algo negativo. Es por eso que he optado por emplear el término precaución mediática”.
La palabra precaución les motiva a interesarse en descubrir qué tipo de información es real, o todo lo contrario.
“Trato de explicarles que pueden ser víctimas de una manipulación informativa. Y eso tiene efecto, porque a nadie le gusta sentirse manipulado”.
Los estudios realizados en Chequia y en otros países coinciden en que los mayores, además de aceptar las informaciones trucadas, las comparten con sus amigos y familiares, creando enormes cadenas de correos electrónicos, asegura Zdeněk Svoboda.
“La República Checa se sitúa entre los países con mayor número de cadenas de correos electrónicos a nivel mundial. De ahí que trato de inculcar a mi auditorio que piense muy bien qué tipo de correos serán difundidos entre los amigos”.Muchos de los afectados por la desinformación son personas que mantienen y alimentan aquel patrón que sugería que las informaciones de la radio y la televisión son reales siempre. Esto ha provocado que sean muchos los perjudicados, manifiesta Svoboda.
“El 60% de las personas de la tercera edad se ven afectadas por la influencia de las redes sociales y por la difusión de cierto tipo de información que no ha sido verificada”.
Además de la fundación Lepší Senior, otras organizaciones ciudadanas disponen de programas de alfabetización mediática para mayores, al tiempo que se presta atención a la juventud, el sector más dependiente de las nuevas tecnologías y redes sociales.