La mayor urbanización en toda Chequia cumple medio siglo
Los cimientos de la Ciudad del Sur de Praga, el barrio de edificios de hormigón prefabricados más extenso de la República Checa, se pusieron en septiembre de 1971.
La Ciudad del Sur (Jižní město), conocida entre los praguenses también como Jižák, es el hogar de casi 80.000 personas, un número comparable con la población de la ciudad de Zlín. Los primeros inquilinos se instalaron en el barrio en 1976, cinco años después de las primeras excavaciones. El cronista del distrito municipal de Praga 11, Jiří Bartoň, fue uno de los primeros residentes del barrio. Con la Radio Checa compartió sus primeras impresiones al mudarse a una casa de hormigón prefabricada, conocida entre los checos bajo la palabra ‘panelák’.
“El entorno de los edificios se vio descuidado debido al esfuerzo de entregar el mayor número de departamentos posible. Dentro de los departamentos pasaba de todo. Cuando tenían unas tuberías demasiado largas, el cuerpo de la calefacción estorbaba en el espacio para los muebles y nosotros tuvimos que acortar las tuberías. Por otro lado, mucha gente defiende el hecho de haber obtenido un hogar y disponer de calefacción central”.
La dura realidad de la construcción socialista
La ausencia de aceras, tiendas y la infraestructura en general fue uno de los problemas palpitantes que queda reflejado en la película 'Panelstory' (1979) de la directora checa Věra Chytilová. La falta de viviendas en la capital checa obligó a la gente a instalarse en el barrio incluso antes de que se acabaran de construir todas las instalaciones y servicios para tener una vida cómoda, explica la historiadora de arquitectura Martina Koukalová, del Instituto de Planificación y Desarrollo.
“Tenemos esta experiencia ya desde los años sesenta, cuando la infraestructura se quedaba atrás con respecto a la construcción de los departamentos. Esta fue la realidad de la construcción durante el socialismo. El problema se incrementó a causa de la extensión del barrio de la Ciudad del Sur”.
Después de medio siglo, el barrio ha registrado notables avances en el desarrollo de su infraestructura, afirma la vecina de la localidad Miroslava Eichnerová.
“Nos mudamos cuando apenas había nada, había barro por todos lados, y yo iba a trabajar con los zapatos sucios. Después me fui a vivir al extranjero y regresé 20 años después. Y veo muchos cambios: una infraestructura social mucho mejor, tiendas, y también bosques”.
La vida en la Ciudad del Sur tiene actualmente una serie de ventajas. Mientras que llegar al centro de la ciudad en el pasado representaba un reto, actualmente el barrio presume de tres estaciones de metro que lleva a los habitantes al corazón de la capital en aproximadamente 15 minutos. La mayoría de los residentes del barrio llega en menos de cinco minutos a una parada del transporte público y en menos de diez minutos a un supermercado, un parque infantil o un centro deportivo. Los vecinos aplauden también la presencia del extenso Bosque de Kunratice (Kunratický les) y las excelentes vistas a la ciudad de Praga que se ofrecen desde las plantas más altas de los edificios. Además de ser la mayor urbanización de la República Checa, la Ciudad del Sur presume también del edificio de hormigón con casas prefabricadas más alto del país, cuyas 23 plantas alcanzan los 81 metros de altura.