La tecnología absorbe el tiempo libre de los checos
El ocio cultural, deportivo o simplemente dedicado a alguna pasión individual parece ser cosa de la vieja generación. Los dispositivos electrónicos, la televisión y el consumo son el principal pasatiempo de la sociedad checa y su descontrol puede ser nocivo.
Según las estadísticas, el 84% de los jóvenes de dieciséis años navega en Internet diariamente y, a su vez, una cuarta parte lo hace más de cuatro horas. Tanto tiempo dentro del mundo virtual es considerado un comportamiento perjudicial, como explica el director del Centro Nacional de Seguimiento de la Drogadicción, Viktor Mravčík.
"La cantidad de personas que disfruta de Internet o, en cualquier caso, de las computadoras y nuevas tecnologías es relativamente alta. Es que aproximadamene la mitad de la población estudiantil durante la semana y los fines de semana pasa en Internet bastante tiempo, unas cuatro horas o más. Se considera que más de dos horas es sobrepasar el punto de peligro".
Cuando no se trata del Internet mismo, entonces son los videojuegos o juegos en línea, que según la Clínica de Adictología de Chequia, suele ser una adicción entre el 5 y el 10% de los niños de once años. Jaroslav Vacek, de la clínica mencionada, comenta que no se trata de una afición inofensiva.
"Así como podemos comparar las drogas entre sí y decir que una tiene más potencial de dependencia que otra, de la misma manera podemos afirmar que los juegos de computadoras son mucho más peligrosos que pasar tiempo en las redes sociales".Agrega que la raíz del problema está en los padres y en el cuadro familiar. Por su parte, la televisión es el aparato preferido de los adultos, y en el caso de los jubilados aún más.
En el diario checo Právo se escribe que los centros comerciales son objeto de recreación para toda la familia. Se cree que en ello tiene un impacto la actual prosperidad de la economía checa, es decir, sueldos más altos y muy bajo índice de desempleo.
El modo tradicional checo de disfrutar los fines de semana en las cabañas o haciendo excursiones en la naturaleza está mermando. No obstante, según el mismo diario, sigue siendo una de las actividades preferidas. De hecho, en el territorio checo hay más 400 000 cabañas de fines de semana, dato que lo convierte en el segundo país de Europa con más cabañas después de Suecia.