La tarta "Frgál de Valaquia" recibe el sello europeo de Denominación de Origen Protegida
La tradicional tarta 'frgál', que se elabora en la región de Valaquia desde el siglo XIX, ha recibido de la Comisión Europea el sello distintivo de Denominación de Origen Protegida sumándose así a más de veinte productos checos con este reconocimiento. Esto supone que bajo el nombre ´Frgál de Valaquia` se podrán vender solamente productos elaborados en la zona de Valaquia, en Moravia del Este, siempre y cuando se respeten las normas establecidas por la denominación.
Actualmente están inscritas en esta entidad catorce panaderías regionales que para poder producir la tarta bajo la denominación ´Frgál de Valaquia` tendrán que cumplir con condiciones especificadas en la normativa, según señala la gerente de la asociación, Alena Pištěláková.
“Tendrán que respetar la receta fijada en las especificaciones. Esta denominación geográfica asegura la protección de la tarta, que además se podrá elaborar solamente en una zona limitada en Valaquia. Su tradición data del siglo XIX y es importante que se mantenga la receta y que todo el mundo sepa que se trata de un alimento de buena calidad”.La norma fijada por el sello de Denominación de Origen Protegida dicta a los panaderos la proporción exacta de grasa en la masa, así como los ingredientes del relleno de la tarta. El representante de la asociación, Pavel Vašut, aproxima más detalles de la norma.
“La tarta 'Frgál de Valaquia' original tiene que contener, según manda el reglamento, entre 300 y 350 gramos de masa y contener un relleno de un solo ingrediente que pueden ser peras, requesón o semillas de amapola. En su superficie hay pasta de harina, huevo, azúcar y mantequilla. Por supuesto, se puede agregar ron u otro ingrediente que le dé mejor sabor”.
Sin embargo, algunos panaderos residentes en Valaquia no van a demandar el sello de denominación para sus tartas, ya que no quieren cambiar sus métodos de elaboración. Por tanto, los nombres de sus productos no podrán llevar la denominación regional de Valaquia.Del control del cumplimiento de la norma se encargará la Inspección Estatal Agrícola y de Alimentos, que en caso del abuso de la denominación protegida podrá otorgar una multa de más de 100.000 euros.
La República Checa actualmente cuenta con más de 20 productos protegidos con la denominación regional como son los quesitos de Olomouc, los tubos de barquillo de Hořice o el jengibre de Pardubice.